Al igual que Negu, a mi también me gusta la poesía. Pero escribo muy poca o casi nada.
Abro este hilo con una poesía mas terrena. Sigo leyendo "Mis poemas del Alma" y me sigue gustando sobremanera.
Si tienen alguna poesía especial para ustedes, las puertas están abiertas.
Empecemos.
El remordimiento
He cometido el peor de los pecados
que un hombre puede cometer. No he sido
feliz. Que los glaciares del olvido
me arrastren y me pierdan, despiadados.
Mis padres me engendraron para el juego
arriesgado y hermoso de la vida,
para la tierra, el agua, el aire, el fuego.
Los defraudé. No fui feliz. Cumplida
no fue su joven voluntad. Mi mente
se aplicó a las simétricas porfías
del arte, que entreteje naderías.
Me legaron valor. No fui valiente.
No me abandona. Siempre está a mi lado
La sombra de haber sido un desdichado
J.L. Borges
Comentarios
y de tus manos vuelan palomas blancas
como un recreo de niños que los hombres miran desde
aquí distante
pienso
mi palabra está primitiva como la lluvia o como los
himnos
Qué tienes,qué tenemos,
qué nos pasa ?
Ay,nuestro amor es una cuerda dura
que nos amarra hiriéndonos
y si queremos
salir de nuestra heerida,
separarnos,
nos hace un nuevo nudo y nos condena
a desangrarnos y quemarnos juntos.
Qué tienes ?Yo te miro
y no hallo nada en ti sino dos ojos
como todos los ojos,una boca
perdida entre mil bocas que besé,más hermosas,
un cuerpo igual a los que resbalaron
bajo mi cuerpo sin dejar memoria.
Y que vacía por el mundo ibas
como una jarra de color trigo
sin aire,sin sonido,sin substancia !
Yo busqué en vano en ti
profundidad para mis brazos
que excavan,sin cesar,bajo tierra:
bajo tu piel,bajo tus ojos
nada,
bajo tu doble pecho levantado
apenas
una corriente de orden cristalino
que no sabe por qué corre cantando.
Por qué ,por qué,por qué,
amor mío,por qué ?
Pablo Neruda
Amiga Dragon, no es necesario el permiso. El foro es para eso, compartir lo que tenemos, compartir opiniones y compartir buenas emociones.
Un abrazo.
Te has ido. Me has dejado solo frente al deseo;
Mi afición a mezclarte con todo lo que veo,
A seguir tu perfume por esa escalerilla:
Nada más necesario, más dulce,
Ni más justo
Que unir en el coloquio tu gusto
con mi gusto.
Y mi gusto va a tí que te llamas “tú”,
A quien digo te quiero, je t’aime, I love you.
En cualquier lengua el verbo capital
Me concierne,
Y hasta muy bien callado también ti voglio bene.
Como aquí no te hallas, a este papel ahora
Le diré que eres tú quien tanto
Me enamora,
Y en esta soledad de diciembre
Quisiera
Dar a tu sola imagen valor de veradera
Compañía. De modo muy leve me contento.
Vivimos en la forma precaria del momento.
Otra yo no conozco. ¿Soledades?
Te has ido.
Ni tú ni yo sabemos de eclipse ni de olvido.
Ya no oteas quizá por el cristal del tren
El paisaje tan tuyo. Y reclinas la sien
Para mejor soñar con los ojos cerrados.
Ah, tus ojos cerrados...Lo sé.
No es que un abismo
Vaya a causarte vértigo. Nada
Existe a tus lados.
Quieres amar así. ¿Me ves? Soy
Tu amor mismo.
es aquel hombre, el que sentado
junto a mi, a mi lado, mi dulce
voz escucha y mi amorosa risa.
En mi pecho el corazón se estremece,
cuando le miro, la voz ya no me sale,
mi lengua se inmoviliza,
un delicado incendio corre bajo mi piel,
no ven ya mis ojos y zumban mis oídos,
el sudor me cubre, un temblor
se apodera de todo mi cuerpo y tan pálida
como la hierba no muy lejana de la muerte
me parece estar. . .
Safo de Mitilene
surge bruscamente.
Me da miedo la luna
embalsamada
en las aguas del río,
el bosque silencioso
que araña con sus ramas
el vientre de la lluvia,
los pájaros
que aún aúllan en el túnel de la noche
y todo
lo que súbitamente
hace un gesto y sonríe
para marchar de pronto.
En medio
de la cruel retirada de las cosas
precipitándose en desorden hacia
la nada y la ceniza
mi corazón naufraga en la zozobra
del destino del mundo que lo cerca.
¿Adónde va ese viento y esa luz,
el grito
de la roja amapola inesperada,
el canto de las grises
gaviotas de los puertos?
¿Y qué ejército es ese que me lleva
envuelto en su derrota y en su huída,
-fatigado rehén, yo, prisionero
sin número y sin nombre,maniatado
entre escuadras de gritos fugitivos-
hacia la sombra donde van las luces,
hacia el silencio donde la voz muere ?
Ángel González
Recomiendo tus labios /
la perfecta ortografía de tus pecas.
Recomiendo tu pelo /
la luz redonda de tus rodillas.
Recomiendo tus manos /
la aritmética simple de tus pechos.
Recomiendo tus suspiros /
el azúcar quemado de tus ojos.
Recomiendo tu sonrisa /
el fósforo de tu silencio.
Recomiendo tu paz /
el sabor inevitable /
tu extensa cercanía.
Tomás Borge
Rafael Alberti
el tabaco inocente, tonto, de tu mirada,
los largos resplandores que por el monte dejas,
al saltar, rayo tierno de brizna despeinada.
Mira esos perros turbios, huérfanos, reservados,
que de improviso surgen de las rotas neblinas,
arrastrar en sus tímidos pasos desorientados
todo el terror reciente de su casa en ruinas.
A pesar de esos coches fugaces, sin cortejo,
que transportan la muerte en un cajón desnudo;
de ese niño que observa lo mismo que un festejo
la batalla en el aire, que asesinarle pudo;
a pesar del mejor compañero perdido,
de mi más que tristísima familia que no entiende
lo que yo más quisiera que hubiera comprendido,
y a pesar del amigo que deserta y nos vende;
«Niebla», mi camarada,
aunque tú no lo sabes, nos queda todavía,
en medio de esta heroica pena bombardeada,
la fe, que es alegría, alegría, alegría.
Cómo me gusta Ángel González! Gracias.
Con tu permiso, cuelgo también un pequeño extracto de uno de sus poemas que se titula "En ti me quedo":
"...
Así,
en ti me quedo,
paseo largamente tus piernas y tus brazos,
asciendo hasta tu boca, me asomo
al borde de tus ojos,
doy la vuelta a tu cuello,
desciendo por tu espalda,
cambio de ruta para recorrer tus caderas,
vuelvo a empezar de nuevo,
descansando en tu costado,
miro pasar las nubes sobre tus labios rojos,
digo adiós a los pájaros que cruzan por tu frente,
y si cierras los ojos cierro también los míos,
y me duermo a tu sombra como si siempre fuera
verano,
amor,
pensando vagamente
en el mundo inquietante
que se extiende -imposible- detrás de tu sonrisa."
Yo tuve un hermano
.
No nos vinos nunca
pero no importaba.
Yo tuve un hermano
que iba por los montes
mientras yo dormía.
Lo quise a mi modo,
le tomé su voz
libre como el agua,
caminé de a ratos
cerca de su sombra.
No nos vimos nunca
pero no importaba,
mi hermano despierto
mientras yo dormía,
mi hermano mostrándome
detrás de la noche
su estrella elegida.
jorge eduardo eielson
poema para leer de pie en el autobús entre la puerta flaminia y el tritone
puedo escribir
así
de ti
contigo
sin ti
tal vez
silbando
como quien no
quiere nada
nada nada nada nada nada nada
o llorando
o comiendo
o bebiendo
o muerto de hambre
resfriado
estornudando
gritando
criatura
que no canto
no pido
no deseo
sino un poco
de alegría
muñeco de las causas
imposibles
monstruo que el rayo ha convertido
en una sonrisa
puedo escribir así
sobre ti
y sobre mí
y nada más
qué tristeza
tú y yo
y nada más
y las calles doradas
de roma
y tú y yo
y nada más
y qué más puede haber
de tú y yo
y los ojos celestes
de roma además
pero qué inútil
tanta luz
entre dos
qué tristeza
tú y yo
y nada más
qué tristeza
escribir y escribir y escribir y escribir
de los dos
hay que ver
prueben
qué harían ustedes
en situaciones tan horrendas
en una habitación tan oscura
sin puertas y sin ventanas
pero claveteada por dentro
sellada por fuera
completamente cubierta de flores perfumadas como los
crisantemos los nardos y otras flores semejantes
una especie de sarcófago en suma
y qué harían ustedes
qué harían
si tuvieran una pierna
en lugar de una nariz
y caminaran con ella
día y noche al pie del tíber
pidiendo limosna a las nubes
desenterrando objetos llameantes
buscando a dios entre las patas
de una mesa
qué harían
a ver
qué harían entonces
seres con rabo
que la sombra
ha pisoteado
respondan temerosos
oh piadosos
maquinarias de rodillas
ante el gran dios fiat
si todo desapareciera bruscamente
por el ojo de la cerradura
del hotel ripetta
o ardieran vuestras propiedades
en un futuro silencio
de uranio
o llovieran carne y huesos
en el vaticano
escupieran pájaros los niños
cruzaran balas
deslumbrantes
flechas
de inusitado poder
afrodisíaco y purgante
y algo más
todavía
yo estúpido animal
avanzo siempre siempre
sin embargo
avanzo siempre siempre
hasta los últimos rincones
donde se orina el sol
se orina la luna llena
se orinan los borrachos
vocifera la mierda
aúlla la soledad
criaturas que arrastráis
un solo
largo
llanto
no tengo nada
nada que ofreceros
ésta es la realidad
mi vida es humo
humo mi casa
y mis amigos
no reconozco
las dos huellas de mis pies
ni mis rodillas
en la arena
pero miro finalmente
el cielo arriba
el cielo abajo
arriba
abajo
arriba finalmente
fijamente
sin temor
ya no por el hueco de la cerradura
por donde miraba entonces
¿recuerdas pobre jorge?
a la puta del hotel
ripetta
creyendo que era celeste
ella también
magnitud ígnea
meteoro cuya caída
es el perfume
cuya memoria
es la memoria
de una joven en el trigo
y no era sino un hocico
pintado
dos bolsas de trapo
tres bolsas de trapo
seis bolsas de trapo
y un estómago sonoro
sonrío ahora ya
finalmente
he aquí mi oficio
pero cuánto me ha costado
he convertido en agua
mi paciencia
en pan
mi soledad
doy de comer
a los muros
de beber
a las sillas
me quema todo
y todo me congela
no sé leer
ni escribir
ni contar
y lo que es claro para todos
para mí es tinieblas
no sirvo para nada
ni para conversar
conmigo mismo
ni para devorar
la televisión
o el cine
no sirvo para nada
no soy nada
esto lo sé
pero cuando me despierto
cosa que hago siempre
antes que los demás
las estaciones brillan
y cuando estoy dormido
es el invierno
generalmente además
soy más alto de día
que de noche
aunque alto no sea
(yo no sé por qué
mi madre hablaba siempre
de mi padre
como de un caballo
grande y silencioso
como un perro
o de un perro grande
y silencioso
como un caballo
la verdad es que mi padre
era tan alto
y encendido
que me era difícil mirarlo
y cuando lo miraba
me caía el sol en la garganta)
pero de nada sirve
de nada sirve escribir
siempre sobre sí mismo
o de lo que no se tiene
o se recuerda solamente
o se desea solamente
yo no tengo nada
nada repito
nada que ofreceros
nada bueno sin duda
ni nada malo tampoco
nada en la mirada
nada en la garganta
nada entre los brazos
nada en los bolsillos
ni en el pensamiento
sino mi corazón sonando alto alto
entre las nubes
como un cañonazo
y en tu nada recoge estas mis quejas,
Tú que a los pobres hombres nunca dejas
sin consuelo de engaño. No resistes
Cuando Tú de mi mente más te alejas,
más recuerdo las plácidas consejas
con que mi ama endulzóme noches tristes.
que no eres sino Idea; es muy angosta
la realidad por mucho que se expande
Dios no existente, pues si Tú existieras
existiría yo también de veras.
el cielo que me tienes prometido
ni me mueve el infiero tan temido
para dejar, por eso, de ofenderte.
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte.
que aunque no hubiera cielo yo te amara
y aunque no hubiera infierno te temiera.
porque aunque lo que espero no esperara
lo mismo que te quiero te quisiera.
Gracias por tu aporte.
se me va de los dedos... En el viento, al pasar,
la caricia que vaga sin destino ni objeto,
la caricia perdida ¿quién la recogerá?
pude amar al primero que acertara a llegar.
Nadie llega. Están solos los floridos senderos.
La caricia perdida, rodará... rodará...
si estremece las ramas un dulce suspirar,
si te oprime los dedos una mano pequeña
que te toma y te deja, que te logra y se va.
si es el aire quien teje la ilusión de besar,
oh, viajero, que tienes como el cielo los ojos,
en el viento fundida, ¿me reconocerás
(Cesar Calvo)
Hoy hemos almorzado de memoria.
De nuevo
de memoria.
Contando alguna tarde de provincia,
mi madre se ha quedado dormida en una alondra.
En una alondra antigua y silenciosa.
¿Quién va a venir ahora, con la voz de esa alondra,
a hablarnos de la dicha y de las rosas?
Con la luz de esa sombra ¿quién va a venir mañana
a hablarnos del perfume radiante de la dicha,
dichoso
de las rosas?
Ya nadie vendrá ahora.
Nos hemos devorado la voz de las alondras.
Ya nadie vendrá nunca.
Contando alguna tarde de provincia,
hoy nos hemos comido para siempre las rosas.
José María Eguren
En el pasadizo nebuloso
cual mágico sueño de Estambul,
su perfil presenta destelloso
la niña de la lámpara azul.
Ágil y risueña se insinúa,
y su llama seductora brilla,
tiembla en su cabello la garúa
de la playa de la maravilla.
Con voz infantil y melodiosa
en fresco aroma de abedul,
habla de una vida milagrosa
la niña de la lámpara azul.
Con cálidos ojos de dulzura
y besos de amor matutino,
me ofrece la bella criatura
un mágico y celeste camino.
De encantación en un derroche,
hiende leda, vaporoso tul;
y me guía a través de la noche
la niña de la lámpara azul.
A trabajos forzados me condena
mi corazón, del que te di la llave.
No quiero yo tormento que se acabe,
y de acero reclamo mi cadena.
No concibe mi alma mayor pena
que libertad sin beso que la trabe,
ni castigo concibe menos grave
que una celda de amor contigo llena.
No creo en más infierno que tu ausencia.
Paraíso sin ti, yo lo rechazo.
Que ningún juez, declare mi inocencia,
porque, en este proceso a largo plazo,
buscaré solamente la sentencia
a cadena perpetua de tu abrazo.
Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.
Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.
Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.
Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.
José Ángel Buesa
no quiero perderme tu furor,
pues en tu caminar dejas amor,
amor por el que mataría.
No des un paso mas querida,
cada tramo que te alejas me parte,
yo tan solo pido y deseo amarte,
tu negativa solo abre mas la herida.
Yo quiero a tu vida pertenecer
y entregarte una flor cada mañana,
flores miles de aroma empañan
mis anhelos a punto de perecer.
Yo te amo como pudiese amar el amor,
no es solo un capricho del destino,
pues junto a tu senda labre un camino
para llenar mi corazón con tu calor.
Dame una mínima esperanza
pues a cada momento desfallezco,
ya que todo de mi te ofrezco
desde mis llantos hasta alabanza.
Se que no merezco tal afecto
ni siquiera de ti una mirada,
y es que tu ser es tan perfecto
que mi vida se escurre sin ti, mi amor, mi amada.
(me da pena decirlo pero no sabia que era un soneto, hasta que vi lo de shaianti arriba y comprendí su estructura. Este lo acabo de hacer en este preciso momento, nada comparado con lo grandes poetas citados arriba, pero tratare de hacer mi luchita y aprender a componer muchísimo mejor)
Saludos
y en el rincón te ocultas donde zumba el insecto,
y allí,donde las aguas estancadas dormitan,
y no hay hermanos seres que interrumpan tus sueños,
! quién supiera en qué piensas,amor de mis amores,
cuando con leve paso y contenido aliento,
temblando a que percibas mi agitación extrema,
allí te escondes,ansiosa te sorprendo !
-!Curiosidad maldita,frío aguijón que hieres!
Las femeninas almas,los varoniles pechos,
tu fuerza impele al hombre a que busque la hondura
del desencanto amargo y a que remueva el cieno,
donde se forman siempre las miasmas infectos.
-¿ Qué has dicho de amargura y cieno y desencanto ?
!Ah!No pronuncies frases,mi bien,que no comprendo,
dime solo que piensas cuando de mi te apartas,
y huyendo de los hombres,vas buscando silencio.
-Pienso en cosas tan tristes a veces y tan negras,
y en otras,tan extrañas y tan hermosas pienso,
que...no lo sabrás nunca,porque lo que se ignora
no nos daña si és malo,ni perturba si és bueno.
Yo te digo,niño,a quién de veras amo:
encierra el alma humana tan profundos misterios,
que cuando a nuestros ojos un velo los oculta,
és temeraria empresa descorrer ese velo,
no pienses,pues mi bien,no pienses en que pienso.
-Pensaré noche y día,
pues sin saberlo,muero.
Es muy hermoso lo que has escrito.
Un abrazo
Aqui dejo algo de un conocido...
Desmayarse, atreverse, estar furioso
Desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso;
no hallar fuera del bien centro y reposo,
mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
enojado, valiente, fugitivo,
satisfecho, ofendido, receloso;
huir el rostro al claro desengaño,
beber veneno por licor süave,
olvidar el provecho, amar el daño;
creer que un cielo en un infierno cabe,
dar la vida y el alma a un desengaño;
esto es amor, quien lo probó lo sabe.
Félix Lope de Vega y Carpio
Te deseo primero que ames y que,
Amando, también seas amado.
Y que, de no ser así, seas breve en olvidar
Y que después de olvidar no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que si es,
Sepas ser sin desesperar.
Te deseo también que tengas amigos y que,
Incluso malos e inconsecuentes, sean valientes y fieles,
Y que por lo menos haya uno en quien puedas confiar sin dudar.
Y porque la vida es así, te deseo también que tengas
Enemigos. Ni muchos ni pocos, en la medida exacta para que,
Algunas veces, te cuestiones tus propias certezas.
Y que entre ellos, haya por lo menos uno que sea justo,
Para que no te sientas demasiado seguro.
Te deseo además que seas útil, mas no insustituible.
Y que en los momentos malos, cuando no quede nada más,
Esa utilidad sea suficiente para mantenerte en pie.
Igualmente te deseo que seas tolerante;
No con los que se equivocan poco, porque eso es fácil,
Sino con los que se equivocan mucho e irremediablemente,
Y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
Sirvas de ejemplo a otros.
Te deseo que siendo joven no madures demasiado deprisa,
Y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
Y que siendo viejo no te dediques al desespero.
Porque cada edad tiene su placer y su dolor
Y es necesario dejar que fluyan entre nosotros.
Te deseo de paso que seas triste,
No todo el año sino apenas un día.
Pero que en ese día descubras que la risa diaria es buena,
Que la risa habitual es sosa y la risa constante es malsana.
Te deseo que descubras, con urgencia máxima,
Por encima y a pesar de todo, que existen
Y que te rodean seres oprimidos
Tratados con injusticia, y personas infelices.
Te deseo que acaricies un gato, alimentes a un pájaro
Y oigas a un jilguero erguir triunfante su canto matinal,
Porque de esta manera te sentirás bien por nada.
Deseo también que plantes una semilla,
Por más minúscula que sea, y la acompañes en su crecimiento,
Para que descubras de cuántas vidas está hecha un árbol.
Te deseo, además, que tengas dinero,
Porque es necesario ser práctico.
Y que por lo menos una vez por año pongas algo
De ese dinero enfrente de ti y digas: 'Esto es mío',
Sólo para que quede claro quién es el dueño de quién.
Te deseo también que ninguno de tus afectos muera
Pero que, si muere alguno, puedas llorar sin lamentarte
Y sufrir sin sentirte culpable.
Te deseo por fin que, siendo hombre, tengas una buena mujer,
Y que, siendo mujer, tengas un buen hombre
Mañana y al día siguiente, y que cuando estéis exhaustos
Y sonrientes, aún sobre amor para empezar de nuevo.
Si todas estas cosas llegaran a pasar,
No tengo nada más que desearte.
Víctor Hugo
Os dejo este hermoso recuerdo de Crémer:
AQUÍ CONTEMPLO VIDA… (Victoriano Crémer)
Aquí contemplo vida, me hago llama
de esta hoguera de manos que levanta
sus negras lenguas a lo alto, siento
que soy un hombre más entre los hombres,
y un vestido de angustias me abandona
sencillamente, así la noche deja
desnuda el alba y libre, aunque con frío,
cuando lejanos sones la presienten,
frío tengo en el alma, pero canto,
ahora que estoy aquí de nuevo y veo
tanto gozo y dolor, tanta miseria
y tan clara esperanza compartida.
Determinarse y luego arrepentirse,
empezar a atrever y acobardarse,
arder el pecho y la palabra helarse,
desengañarse y luego persuadirse;
comenzar una cosa y advertirse,
querer decir su pena y no aclararse,
en medio del aliento desmayarse,
y entre el temor y el miedo consumirse;
en las resoluciones, detenerse,
hallada la ocasión, no aprovecharse,
y, perdida, de cólera encenderse,
y sin saber por qué desvanecerse:
efectos son de Amor, no hay que espantarse,
que todo del Amor puede creerse.
Juan de Tassis, conde de Villamediana.
que sin tus palabras me siento vacía
que sin tu sonrisa,no sé vivir
que sin tus ilusiones, no soy nadie
que sin tus sueños,no sé soñar.
Como decirte
que sin tu luz no sé que és la alegría
que sin ti,no hay estrellas que brillen ni lunas que alcanzar
que sin ti,los besos saben a sal
que sin ti,la vida sabe a menos.
Como decirte
que sin ti
no merece la pena conjugar el verbo amar.
( no és de lo mejor que he escrito,pero hasta de lo malo hay que aprender )
Una noche
una noche toda llena de perfumes, de murmullos y de música de alas,
Una noche
en que ardían en la sombra nupcial y húmeda, las luciérnagas fantásticas,
a mi lado, lentamente, contra mí ceñida, toda,
muda y pálida
como si un presentimiento de amarguras infinitas,
hasta el fondo más secreto de tus fibras te agitara,
por la senda que atraviesa la llanura florecida
caminabas,
y la luna llena
por los cielos azulosos, infinitos y profundos esparcía su luz blanca,
y tu sombra
fina y lángida
y mi sombra
por los rayos de la luna proyectada
sobre las arenas tristes
de la senda se juntaban.
Y eran una
y eran una
¡y eran una sola sombra larga!
¡y eran una sola sombra larga!
¡y eran una sola sombra larga!
Esta noche
solo, el alma
llena de las infinitas amarguras y agonías de tu muerte,
separado de ti misma, por la sombra, por el tiempo y la distancia,
por el infinito negro,
donde nuestra voz no alcanza,
solo y mudo
por la senda caminaba,
y se oían los ladridos de los perros a la luna,
a la luna pálida
y el chillido
de las ranas,
sentí frío, era el frío que tenían en la alcoba
tus mejillas y tus sienes y tus manos adoradas,
entre las blancuras níveas
de las mortüorias sábanas!
Era el frío del sepulcro, era el frío de la muerte,
Era el frío de la nada...
por los rayos de la luna proyectada,
iba sola,
iba sola
¡iba sola por la estepa solitaria!
Y tu sombra esbelta y ágil
fina y lánguida,
como en esa noche tibia de la muerta primavera,
como en esa noche llena de perfumes,
de murmullos y de músicas de alas,
se acercó y marchó con ella,
se acercó y marchó con ella,
se acercó y marchó con ella...
¡Oh las sombras enlazadas!
¡Oh las sombras que se buscan y se juntan
en las noches de tristezas y de lágrimas!
triste pensamiento, un rato;
quizá prodréis persuadirme,
aunque yo sé lo contrario,
que pues sólo en la aprehensión
dicen que estriban los daños,
si os imagináis dichoso
no seréis tan desdichado.
alguna vez de descanso,
y no siempre esté el ingenio
con el provecho encontrado.
Todo el mundo es opiniones
de pareceres tan varios,
que lo que el uno que es negro
el otro prueba que es blanco.
lo que otro concibe enfado;
y lo que éste por alivio,
aquél tiene por trabajo.
al alegre de liviano;
y el que esta alegre se burla
de ver al triste penando.
bien esta verdad probaron:
pues lo que en el uno risa,
causaba en el otro llanto.
ha sido por siglos tantos,
sin que cuál acertó, esté
hasta agora averiguado.
el mundo todo alistado,
conforme el humor le dicta,
sigue cada cual el bando.
sólo es digno el mundo vario;
y otro, que sus infortunios
son sólo para llorados.
y razón en qué fundarlo;
y no hay razón para nada,
de haber razón para tanto.
y siendo iguales y varios,
no hay quien pueda decidir
cuál es lo más acertado.
¿por qué pensáis, vos, errado,
que os cometió Dios a vos
la decisión de los casos?
severamente inhumano,
entre lo amargo y lo dulce,
queréis elegir lo amargo?
¿por qué siempre he de encontrarlo
tan torpe para el alivio,
tan agudo para el daño?
que sirve para ambos cabos:
de dar muerte, por la punta,
por el pomo, de resguardo.
queréis por la punta usarlo,
¿qué culpa tiene el acero
del mal uso de la mano?
discursos sutiles, vanos;
que el saber consiste sólo
en elegir lo más sano.
y examinar los presagios,
sólo sirve de que el mal
crezca con anticiparlo.
la atención, sutilizando,
más formidable que el riesgo
suele fingir el amago.
del que, indoctamente sabio,
halla de lo que padece,
en lo que ignora, sagrado!
vuelos del ingenio osados,
que buscan trono en el fuego
y hallan sepulcro en el llanto.
que si no se va atajando,
cuando menos se conoce
es más nocivo el estrago;
y si el vuelo no le abaten,
en sutilezas cebado,
por cuidar de lo curioso
olvida lo necesario.
crecer al árbol copado,
quita la sustancia al fruto
la locura de los ramos.
no estorba lastre pesado,
sirve el vuelo de que sea
el precipicio más alto.
¿qué importa al florido campo,
si no halla fruto el otoño,
que ostente flores el mayo?
el producir muchos partos,
si a la multitud se sigue
el malogro de abortarlos?
ha de seguirse el fracaso
de quedar el que produce,
si no muerto, lastimado.
que, con la materia ingrato,
tanto la consume más
cuando él se ostenta más claro.
tan rebelado vasallo,
que convierte en sus ofensas
las armas de su resguardo.
este duro afán pesado,
a los ojos de los hombres
dio Dios para ejercitarlos.
de nosotros olvidados?
Si es para vivir tan poco,
¿de qué sirve saber tanto?
¡Oh, si como hay de saber,
hubiera algún seminario
o escuela donde a ignorar
se enseñaran los trabajos!
el que, flojamente cauto,
burlara las amenazas
del influjo de los astros!
pensamiento, pues hallamos
que cuanto añado al discurso,
tanto le usurpo a los años.