Suena el teléfono. Miro nerviosa la pantalla del móvil; es él, llevo todo el día esperando su llamada, a pesar de saber que me llamara a esta hora, como siempre. Cierro los ojos mientras me hago esperar unos segundos antes de cogerlo.
- ¿Sí? - Contesto disimulado mi impaciencia.
- ¿Estás preparada? – Pregunta dejando escapar una leve risotada.
- ¿Preparada para qué? – Comienza nuestro juego.
- Eso tendrás que comprobarlo..
……………….
Le veo, le veo allí a lo lejos. Todas las noches el mismo juego, el mismo lugar. Es extraño, aun no soy capaz de distinguir bien este sitio, parece que todos mis sentidos se clavan en él al verle aparecer, haciendo que el resto del mundo se oscurezca hasta desaparecer.
A pesar de estar aun bastante lejos puedo distinguir su sonrisa, su hermosa y reluciente sonrisa. Sus labios marcan una línea perfecta, una línea que encaja como pieza de puzzle con sus dientes casi inmaculadamente blancos.
Comienza a caminar lentamente hacia mí, fijando sus oscuros ojos en los míos. Ya puedo notar como un cosquilleo comienza a recorrer mi estomago, bajando por mi vientre hasta pararse en mi entrepierna, concentrándose en ese único lugar.
-Muéstrame como me deseas. – Susurra sin apartar su magnífica sonrisa de su angelical rostro.
Le correspondo su sonrisa brindándole una de las mejores de las mías. Mis manos comienzan a deslizarse por mi apretada blusa blanca, desabrochando lentamente cada botón, dejando al descubierto mis senos aun tapados por un sujetador de color negro, una o dos tallas menos de la que realmente uso, haciendo así que gran parte de mis senos se salgan por encima de este, sé que esto le encanta.
Termino de quitarme la blusa y la tiro hacia él; la agarra al vuelo, la toma con ambas manos mientras se la lleva hacia su rostro y la huele a la vez que cierra los ojos, embriagándose de mi aroma, desliza su lengua por sus labios antes de volver su mirada hacía mí. Me recorre con la mirada, puedo ver la lujuria bailando en sus profundos ojos.
Me doy la vuelta dándole la espalda, coloco ambas manos en mi trasero y lo acaricio haciendo que mi minifalda, de tablas blancas y rojas, se suba dejando a la vista mi diminuto tanga, también de color negro, que parece tan solo estar adornando mi pequeño, pero respingón culo.
Juego con mis manos acariciando mi suave piel, subiendo ambas manos por mi espalda, donde se detienen a la altura del sujetador, agarrando el broche para desabrocharle. Me lo quito dejándolo caer al suelo, a la vez que contoneo mi culo de un lado a otro con un vaivén incesante.
Me volteo hacia él tapándome mis senos con mis manos. Los acaricio a la vez que vuelvo a contonear mi cuerpo, haciendo una especie de baile que parece embelesarle; voy dejando que se vea cada tanto mis pezones, mis ya duros pezones.
Suelto uno de mis senos dejándolo totalmente a su vista y bajo esa mano por mi cuerpo, sobre m piel desnuda, deslizándola por mi estomago, por mi vientre, hasta llegar al borde de la minifalda; meto los dedos por el borde y agarro el tanga, tirándolo hacia arriba. Noto como se va mojando la diminuta prenda interior, como ese cosquilleo que se concentró hace unos pocos minutos en mi entrepierna, se torna en calor y humedad.
Le recorro con la vista, con la mirada lasciva, hasta dejarla fija en sus pantalones, mientras, continuo tirando de mi tanga y agarro uno de mis pezones retorciéndolo de un lado a otro para luego tirar de el hasta que se escapa de entre mis dedos. Puedo ver un bulto entre sus piernas, me muerdo mi labio inferior imaginándome su duro miembro totalmente erecto esperando entrar en mí, lo que hace que me moje un poco más.
Levanto la vista y le veo sonreír, sabe que deseo sentirle dentro de mí, todo lo dentro de mí que pueda. Baja sus manos hasta su vientre, mete una de ellas dentro de su pantalón, puedo distinguir a través de la ropa como toma su miembro y lo acaricia, con la otra mano se aparta el pantalón sacándolo lentamente.
- ¿Lo quieres? – Pregunta con la voz entrecortada mientras se masturba.
Yo tan solo asiento con la cabeza, estoy demasiado caliente para gesticular alguna palabra. Meto ambas manos debajo de mi minifalda, agarrando el tanga, bajándole hasta las rodillas, soltándole ahí dejando que caiga solo. Me subo la minifalda a la vez que me doy la vuelta y me pongo en pompa apoyándome con una de mis manos en la pared, la otra rápidamente me la llevo a mi entrepierna y me meto hasta el fondo dos dedos, no podía aguantar más, estoy tan caliente y mojada que mis dedos rápidamente se empapan.
Él camina hacia a mí, hasta detenerse detrás, siento su duro miembro rozando mi culo; me agarra de la cadera, acariciándome, susurra algo a mi oído, pero no le entiendo, tan solo vuelvo a asentir con mi cabeza mientras muevo cada vez más rápido mis dedos dentro de mí, masturbándome, haciendo que mi respiración se agite hasta el punto de dejar escapar pequeños gemidos.
Mueve su miembro por mi culo, rozándome, acariciándome con el. Se detiene en la entrada, colocándole listo para entrar en mi, comienza a empujar lentamente haciendo que la punta entre con dificultad debido a mi estrecho e inexperto culo; no puedo evitar sentir dolor a la vez que placer.
Con una mano me acaricia la espalda a la vez que con la otra se agarra a mi cadera. De un solo movimiento lo mete hasta el fondo de mí, grito a la vez que araño la pared y me estremezco de dolor, pero extrañamente también de placer. Él se hace hacia delante hasta quedar a la altura de mi oído y me susurra con su entrecortada voz a la vez que hace su cadera hacía atrás sacando parte de su miembro de mí.
- Perdón, no pude evitarlo.. – Lo mete de golpe de nuevo haciéndome gritar.
- No seas tan malo… - Alcanzo a decir en forma de reproche.
Se ríe mientras hace su cadera hacía atrás haciendo que todo su miembro salga de mi culo. Agarra la mano que tengo en mi entrepierna y la aparta de ahí, yo cedo enseguida, apoyándome ahora con ambas manos sobre la pared. Aprovecha para pasar su mano por mi mojada entrepierna, empapándose los dedos de mí; seguidamente acerca una de esos dedos a mi boca y lo lamo, saboreando el sabor mi propia entrepierna, luego se lo lleva a su boca y le miro mientras los lame cerrando los ojos, disfrutando de mi sabor.
Agarra de nuevo su miembro y lo pone a la entrada de mi entrepierna, empuja un poco dejando parte de su miembro dentro de mí y aparta la mano, ahora empuja bruscamente y de golpe quedando totalmente dentro de mí, ambos dejamos escapar un gemido debido al placer.
Noto todo su duro y grueso miembro dentro de mi húmeda entrepierna, pero no se mueve, estoy impaciente, comienzo a mover mi cadera mientras noto como él se ríe, rio con él; le gusta volverme loca, lo sé.
- Dame.. Destrózame.. – Digo casi en una súplica sin evitar pequeñas risitas..
Él no tarda en comenzar a mover su cadera, haciendo que su miembro entre y salga de mí con rapidez, se aferra con ambas manos a mi cadera, moviéndome a su antojo, haciendo de las penetraciones cada vez más fuertes y profundas. Nuestras respiraciones se agitan al punto de no distinguir los gemidos de la propia respiración; nuestros cuerpos se estremecen entregándose al placer, fusionándose en un solo cuerpo, en un solo ser.
Al cabo de unos minutos ambos nos encontramos al borde del éxtasis, me aferro con fuerza a la pared a la vez que noto como él me agarra aun más fuerte de la cadera…, liberamos todo el placer en un fuerte gemido, mucho más fuerte que todos los anteriores, llegando al orgasmo casi al unisonó.
………………..
Escucho su respiración tranquilizarse poco a poco a través del teléfono, junto a la mía. Abro los ojos y me encuentro desnuda sobre la cama, sola, como cada noche; siempre parece tan real, como deseo que vuelva a mi lado.
- ¿Mi amor? - Pregunta aun con la voz entrecortada.
- Dime – Contesto tratando de disimular mi tristeza.
- Te amo.. – Puedo notar un matiz de melancolía en su voz..
- Yo también te amo.. – Digo finalmente mientras una lágrima resbala por mi rostro..
Comentarios
A pesar de ser una historia un poco triste esta cargada de pasion
Espero que sigas escribiendo asi y como en todo lo que haces,
que con el tiempo vayas superandote a ti misma
Besos!
Me alegra un montón que te gustara.
Intentaré superarme poco a poco en esto. ^^
Un besito
Vaya.., no pasa nada, no te preocupes.
Ni me di cuenta
Madre mía, logra plenamente el objetivo principal de un relato erótico. Bien escrito, el ritmo perfectamente aupado. Se lee aguantando el aire.
El final, buenísssimmmmmo.
Otra cosa: la figura del hombre queda difusa, entre nieblas. Me gusta, tiene un puntito de inquietante, de muy extraño.
Felicidades.
Gracias por tus ánimos ^^
A ver si me animo, saco un poco de tiempo y escribo otro relato erótico
Podrías pulir la ortografía, porque algún errorcillo sí tienes, pero, por lo demás, está genial.
¡A por el próximo!
La técnica de esta para mi una profesional en este estilo erotico, es tan depurada y apropiada al tema que muy bien pudiera publicar sin problemas.
Nocturnae, no te pierdas ni nos dejes, y sigues regalándonos tus fantasías eróticas tan vivas, tan bien escritas, y tan impactantes.
Saludos de Rocinante
bueno mi redaccion no es muy buena pero espero pronto poder escribir algun relato
Darte la enhorabuena y felicitarte, yo quizás me atreva en breve a escribir un relato de este tipo y así expresarte mejor mis ideas....
Saludos ^^
tan sólo un par de chorradillas; una, los colores. Que están muy bien porque destacan, pero estilísticamente no quedan bien. La otra, una pequeña revisión orotgráfica. pero poner dos peguitas de nada eh, el resto genial
Me alegra que te gustara el relato en si y que te tomaras un poco de tu tiempo en comentar, gracias.
Vale!!!