La tormenta que estalló en la tarde añil de primavera había llenado de lluvia la ciudad, transformando la Cuesta de Gomerez en un arrollo poderoso que fluía sobre su lecho de piedras de otro siglo hasta la Plaza Nueva, llevándose consigo todas las hojas y cañas desprendidas de los bosques de la Alhambra. Ante tamaño aguacero los turistas confundidos, habían desaparecido de las inmediaciones diseminándose tan fugaces como hormigas sorprendidas. Solo Alma avanzaba desafiante a través del diluvio, bajando la alta cuesta con pasos tan firmes y gráciles como si fuera el espíritu mismo de la calleja. La gitanilla se deslizaba por un hilo de acera chorreando rosas. Un rastro de pétalos encarnados señalaba el camino recorrido como si se tratara de una novia festejada.
"Por motivos personalísimos y literarios he tomado la decisión eliminar mis textos, agradeciendo su interés a todos mis lectores, en especial a aquellos que dejaron sus comentarios, siempre gratos: Juancho, Jeno, Sinrima, Shaianti, Ariel, Dragón, Tigre, Fabrizzio, Amparo, Necrocrymi, Nefertiti y todos los demás... Gracias por alumbrar mis textos. Mis más cordiales saludos a todos."
Claudine
Comentarios
Unas brevísimas pinceladas para enmarcar un gesto muy cotidiano de la ciudad: las vendedoras que se pasean de aquí para allá con su ramito, almas con un corazón fuerte y poderoso a las que nadie escucha... es mi pequeño homenaje a esas mujeres que solo buscan llevar unos céntimos a sus hogares.
Un saludo.
Muchísimas gracias, valoro mucho tus comentarios, pues me encanta tu escritura.
Un abrazo.
Exquisito tu sentir.
Firma: La Bestia (tú eres la Bella).
Muchísimas gracias.
Hermosa ciudad ¿verdad? Dá para tantas letras...
Mis más cordiales saludos.
Mi mayor deseo es tan solo transmitirlo y que sea recibido...
Muchísimas gracias, de todo corazón.
¡Un gran saludo!
Agradezco tus consejos y me parecen muy interesantes para aprender. Comparo la escritura con pintar un cuadro, una de mis aficiones favoritas. Me entrego a mi pequeña obra y pasado un tiempo necesito dejarla para tomar nueva perspectiva. Luego vuelvo al lienzo y sobresalen en él muchos de sus defectos, pero otros pasan desapercibidos y son las personas ajenas al propio cuadro las que los sacan a relucir.
Esto mismo acabas de hacer de manera muy constructiva y te doy las gracias por tu atención e interés, pues son detalles que tomaré en cuenta en adelante.
Mis mas cordiales saludos.