Amigos de la infancia
- ¿Sabías que nuestra amiga Catalina me besó de improviso en la mejilla una tarde en este mismo parque y en
este mismo banco y yo creía que se había enamorado de mí?
- No, no lo sabía.
- Pensaba en aquel momento que era mi
gran oportunidad con ella. Pero me equivoqué, amigo mío; Catalina era una mujer
calculadora, interesada, aprovechada, egoísta...
- Muchas mujeres hacen cosas tan sorprendentes
que desconciertan.
- Así es, mi buen amigo.
- Esa es una de las cosas que no me gusta de ellas.
- ¿Pero qué haríamos los hombres si no existieran las mujeres?
- Esa es otra cuestión, mi buen amigo.
- Creo que debemos admitirlas como son.
- Vale, de acuerdo, pero eso no quita que me repugnen las maniobras
extrañas que son capaces de hacer algunas para dar a entender que
las cosas que hacen o dicen son normales, cuando ellas saben que no
lo son.
- Bueno, nosotros, a nuestra edad y viudos, ya estamos a salvo de esas artimañas.
- Será tu caso, porque a mí me está tirando los tejos mi vecina Dolores, y tiene veintidós años menos que yo...
Comentarios
jajajajaja... ¡Ay, Dolores de miarma!
Malizzia, matrimonio cantante sevillano canta "La Dolores"