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diario de los foreros

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Comentarios

  • GalufGaluf Pedro Abad s.XII
    editado agosto 2009
    diario de polixena:
    e estado ausente 5 dias y e visto que nadie a respondido al 4 capitulo de mi primera creacion.
    espero que no les haya aburrido pero me mantiene las esperanzas el final de esta historia
    para la proxima ves creo q tratare de poner el texto completo en vez de ir capitulo por capitulo
  • ShangoShango Pedro Abad s.XII
    editado agosto 2009
    Me aburro.........
    Estoy intentando escribir, pero últimamente estoy bloqueada... y yo que pensaba que ya me había desbloqueado... ¡No sé cómo estructurar mi historia!
    Me meteré un rato en foros...
  • POLIXENAPOLIXENA Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV
    editado agosto 2009
    A vuelto Kundry, una buena noticia.
    Hoy me voy mejor de lo que llegué, en lo que queda de día me pondré la caracola al oído y para adelante.:p
  • GalufGaluf Pedro Abad s.XII
    editado agosto 2009
    hoy vi nuevamente mi "intento de escritor" y fue mejor hacer el papel de "vago en vagon"...
    al parecer ya no me queda mas por hacer mas que ver mis historias pudrirse en el cuaderno en las cuales han sido escritas
    ya no se si vale la pena seguir esto.
    pero como antes dije mas de una vez nunca quise ser escritor, solo escrivia por que hera lo unico que puedo hacer en mi trabajo sin tener que hacer una falta al reglamento.
    no se si quedarme en la duda o emigrar a otras fronteras...
    el mundo es grando que puede llegar a herir
    nose que hacer
  • POLIXENAPOLIXENA Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV
    editado agosto 2009
    Galuf escribió : »
    hoy vi nuevamente mi "intento de escritor" y fue mejor hacer el papel de "vago en vagon"...
    al parecer ya no me queda mas por hacer mas que ver mis historias pudrirse en el cuaderno en las cuales han sido escritas
    ya no se si vale la pena seguir esto.
    pero como antes dije mas de una vez nunca quise ser escritor, solo escrivia por que hera lo unico que puedo hacer en mi trabajo sin tener que hacer una falta al reglamento.
    no se si quedarme en la duda o emigrar a otras fronteras...
    el mundo es grando que puede llegar a herir
    nose que hacer
    Me acabo de enfandar después de leerte Galuf:mad::mad::mad:, ni se te ocurra dejar de escribir. Cantidad de textos se quedan sin comentarios y no por eso hay que hundirse. ¿Tú lees y comentas todos los textos?
    Ánimo eh??? Te lo dice Polixena la que últimamente no levanta cabeza... Así que venga boli, papel y a la aventura!!!
  • GalufGaluf Pedro Abad s.XII
    editado agosto 2009
    ayer termine otro mas de los libros de bolsillo que siempre hago...
    pensando que lo hacia por compromiso me di cuenta q no lo era de ese modo
    al terminar vi que inconcientemente ya estaba en el wuinto titulo de la saga q quiero escrivir...
    me siento muy mal al haber escrito lo de ayer, fue algo muy egoista de mi parte...
    y tratare de hacer la proxima publicacion mejor que la primera.
    Si no, lo que estoy haciendo aqui no tendria sentido
  • el rincon de los sueñosel rincon de los sueños Pedro Abad s.XII
    editado agosto 2009
    hola a todos,permitirme que abra las paginas de este diario para compartir con todos ustedes un trocito de mi.
    hace días que unos pensamientos rondan mi cabeza pero no me atrevo ni a pronunciar palabra sobre ello.
    a ver si algún día le hecho coj... perdón, valor y lo comparto a ver si alguien me puede dar un consejo....
    un placer compartir mi tiempo con todos ustedes,besossss
  • artemisaartemisa Fernando de Rojas s.XV
    editado agosto 2009
    Hola Diario hoy es un buen día para quedarse en cama o por lo menos, en casa calientita. La lluvia cae ensordecedora sobre los tejados. Sin embargo, mi cuerpo se ha ganado unas angustias de caminante de esas de antaño: el resultado es un leoncito encerrado entre cómodos y mullidos almohadones que comienzo a deshilachar...
  • MaxmaxMaxmax Gonzalo de Berceo s.XIII
    editado agosto 2009
    Querido diario de Polixena,

    Hace escasamente 5 días que me concebí desde fuera… ¿Hasta qué punto volveré a considerarme el que pensaba que era? Una pregunta que envuelta en una única lágrimas se deslizaba, y entre el cuello de mi camisa y la mejilla de mi hijo recién-nacido, desaparecía…

    A veces, de tan hermosa que es la vida casi te obliga olvidarte de que existes…
  • eanueanu Banned
    editado septiembre 2009
    Estoy cansado de ser yo.
  • POLIXENAPOLIXENA Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV
    editado septiembre 2009
    Querido diario,
    Sigo esperando y cada vez con más dudas... Voy a acabar siendo Polixena de día y Polixena de noche, será más divertido.
    Besos
  • EzequielEzequiel Banned
    editado septiembre 2009
    eanu escribió : »
    Estoy cansado de ser yo.


    Quisiera decir lo mismo respecto a mi, pero un pequeño problemilla se interpone... aún no se quien soy.
    ¿O acaso lo se, y nuble mi mente por no querer aceptarlo?
    Pero bueno, es de noche, y me satisfecho con solo saber que mañana saldrá el sol.
  • sara.sara. Pedro Abad s.XII
    editado septiembre 2009
    Querido diario:
    Madrid ha despertado lluvioso y grisáceo. Es una mañana meláncolica que invita a la soledad, la reflexión. Evoca constantemente el placer que sería leer un libro al calor del hogar en este día, disfrutar de las amadas letras.

    Y sin embargo, aquí estoy en la oficina con los números, las prisas... y muy pocas ganas de trabajar hoy (¡y quedan aún tantas horas hasta que llegue a casa!)
  • FridaFrida Gonzalo de Berceo s.XIII
    editado septiembre 2009
    Querido diario, te abro una vez más. De nuevo me asusta tu página en blanco y recordar que en realidad no tengo nada que contar.
  • sergioglopez1980sergioglopez1980 Anónimo s.XI
    editado septiembre 2009
    Querido diario:

    He vuelto a pensar en B. Sé que debería olvidarme de ella y seguir adelante con mi vida, pero ¿cómo puedo hacerlo? si la veo todos los días en la oficina. Hoy la encontré en la cafetería. Me miró con sus ojos negros, con esos ojos que taladran el alma y que me obligan a bajar la vista cada vez que se fijan en mí. Tal vez fue sólo una ilusión óptica, pero, por un momento, creí ver que una lágrima rodaba sobre su mejilla. En ese instante me sentí impelido a correr hacia ella, a abrazarla y a secar sus ojos con mis labios, pero tuve que contenerme debido a que apareció el imbécil de P. El muy taimado me sonrió con una mueca hipócrita y se acercó a B., dirigiéndole una mirada cómplice. Bien sé yo que son amantes, aunque ambos se esfuercen por ocultarlo. Ella lo observó con sumisión, y pude ver en sus ojos de mujer enamorada el reflejo de un sentimiento extraño, mezcla de adoración y de deseo carnal. Esto me revolvió el estómago y tuve que huir del lugar, para deleite de P., que comprendía claramente el motivo de mi súbita retirada.
    ¿Por qué eligió ella a ese ser abyecto y desprovisto de virtudes? ¿Qué felicidad puede encontrar en el desprecio con el que la trata? ¿Acaso no sospecha que es para él sólo una aventura? ¿O es justamente esto lo que la excita tanto? ¡Oh, Dios! El hecho de pensar en esta última posibilidad me atormenta sobremanera. No puedo creer que B. sea capaz de sentir tan bajas inclinaciones, no, no es posible, debo estar equivocado. Sin embargo, es la única explicación para su comportamiento, es la única explicación para ese servilismo despreciable con el que intenta conquistar su cariño. ¿Por qué no puede ver B. que la amo con toda mi alma y que es para mí lo más preciado que hay en el mundo? Debería adivinar, en la dulzura con la que la miro, que gustoso entregaría por ella mi vida a cambio de prolongar la suya un segundo más.
    Es verdad que soy un simple conserje y que ella es una exitosa abogada, pero ¿no es acaso ésta una barrera pequeña para el amor? Sé que podrías objetarme, querido diario, que soy casi invisible para ella, que soy poco más que un insecto, poco más que una mancha de café en uno de sus expedientes, pero esta situación puede cambiar, por cierto que cambiará. Tal vez mañana, tal vez mañana me atreva, por primera vez, a dirigirle a B. la palabra.
  • QuintilianoQuintiliano Anónimo s.XI
    editado septiembre 2009
    ..sin olvidar pero sí dejando un poco de lado de momento la naturaleza y elementos artificiales construidos por el hombre que nos entran por los ojos, otras percepciones nos estimulan también tanto o más, tales los distintos ruidos y olores. Ambos distintos según se corra en ciudad, campo, montaña o playa, y en cada uno de estos y más sitios que haya y sé que los hay, distintos y específicos de cada uno de los lugares puntuales de coordenadas concretas y específicas y no grandes zonas abarcables por donde pasas. Los ruidos de ciudad, aunque más cuantiosos que en el campo, montaña o playa, y como uso menos el sitio, pero sí a veces algún día de fin de semana, sobretodo cuando me voy durante mucho tiempo corriendo hasta la playa, antes pasando por distintas calles asfaltadas y con aceras, papeleras, contenedores de basura, olor a basura, deposiciones de perros en las aceras; y que están en la periferia de la ciudad pero formando parte del núcleo urbano y no campo; apenas me sorprenden, la ambulancia, la pitada del coche de detrás, el chirrido de las ruedas delanteras del otro coche en el semáforo, el grito del conductor que las más de las veces es de enfado y no de alegría,

    el gol del Madrid o Barcelona u otro equipo, en el momento exacto y coincidencia en que pasas por la acera del bar abierto y quienes ven la televisión se encargan de transmitírselo bien a otro aficionado que tiene al lado que también ve el mismo aparato de televisión en la misma cadena sitio y hora, para que se entere bien, y es seguro que se entera muy muy bien, porque aunque le tiene a cuarenta centímetros, emplea tal tono de voz como si le tuviese a cuatrocientos metros, y quién oye también lo transmite a quién dijo, para que no haya dudas en el mensaje, y en algunos casos se repite varias veces entre quienes han visto ese gol del Madrid, Barcelona u otro equipo, esa melodía de notas graves y decibelios bien de notar sin saber cuántos, aunque indudablemente un montón de ellos porque quienes ven el partido suelen ser señores de recios pulmones trabajados en los distintos trabajos que son de esfuerzo físico y no filosófico, quizá de sectores del mundo laboral que con motivo de la crisis tuvieron su decadencia y hablo de la construcción, aunque sin olvidarme de trabajadores de otras actividades que aunque no tengan así de entrenados los pulmones, el ímpetu que le ponen en ese momento puntual en que el balón se mete en la red del contrario les hace extraer energía hasta de los talones, tal energía que su melodía anunciando el hecho da evidencia y no duda;

    y el matrimonio que va hablando por la calle a gritos entre ellos como si estuviesen a cien o más metros uno del otro, pero que están a menos de un metro, si no van enfadados porqué gritan, y comprendo que tal vez sea por el ruido de fondo, y que puedan tener una minusvalía de oído, pero si son jóvenes, no entiendo, o quizá lo entendiese si fuesen las únicas personas que gritan y no la mayoría como es la realidad; y que por lo visto a muchos extranjeros, sobretodo de países nórdicos cuando vienen a España, más en el Sur u otras zonas calientes de la península, les suele ocurrir lo mismo que a mí y que no entiendo del todo y es el porqué en este cálido país el nuestro se habla tan a gritos (claro en el campo la gente también habla a gritos, pero tiene su razón en que las lindes que separan las fincas suelen estar a cien y más metros unas de otras, y las gentes del campo se empeñan en hablar con el vecino cada uno desde su finca), y sigo con los gritos porque a mí cuando corro no me molestan, pero sí y mucho cuando llego a la playa y después de bañarme busco el sitio de los más solitarios del bosque de palmeras para estirar y relajarme como todos sabéis que gusta relajarse después de un buen rato de ejercicio físico y es aquí en este momento donde más agradezco el silencio;

    aún así, y aunque estoy medio sordo por no decir sordo entero desde hace muchos años del infortunio de una traca de pólvora en la ciudad del arroz en paella de donde también hay muchos aficionados a correr; y nunca o rara vez cesa ese par de mujeres, (mujeres y puede que también algún hombre, no descartemos de antemano), que para mí serían tal vez algo más admirables en todo o casi todo, ojo que digo casi y no todo, ya que cuando se juntan dos o más de dos, a dar cuentas de cada uno de los miembros de esa comunidad de propietarios respectivos de la que cada una de ellas es miembro, a grito vivo, insisto a grito vivo, tanto que nos enteramos todos los presentes y los alejados, pero muy bien enterados y sin lugar a dudas, aunque hay momentos en que hablan las tres o más a la vez y el volumen se multiplica por el mismo número exponencial perdiéndose nitidez de resultados en el receptor; y dicen y repinten, y dale, y erre que erre durante tres o cuatro horas cuando no son cinco o más, y digo yo, y aunque te cambies de sitio no solucionas, porque ya sabes eso de más vale malo conocido que bueno por conocer, y a saber quién te va a tocar en el otro lado donde piensas irte y porque el radio de acción de estos afanados oradores es inmenso, y vaya tortura, y ni que decir que me compadezco de quién vino de Madrid o Toledo a relajarse en las cálidas azules pacíficas aguas y vacaciones en la orilla del Mediterráneo en la ilusión ahorrativa durante año entero para ahora disfrutar y no a enterarse en sentido obligatorio y nunca voluntario, porque aquí la voluntad del receptor ajeno pero bajo la cúpula sonora de la tertulia es más que cuestionable, del tejemaneje de tres o más comunidades de vecinos, número que puede variar dependiendo del número de contertulias (o algún que otro posible de lo mismo en masculino, no saquemos prejuicios), que a pesar de todo, menos mal que no se cumplen los deseos que se me ocurren cuando empiezan con esa tarea tan vital e importante para ellas o él, y...
  • QuintilianoQuintiliano Anónimo s.XI
    editado septiembre 2009
    ..en orden lógico ahora debería seguir con los ruidos, que mira que da de sí el tema, y claro y que la lógica dice del orden que es esperable en alguien que escribe, y es que quizá debería seguir con los olores. Pero, como cuando vamos corriendo la cabeza, digo mejor los pensamientos, van de mata en mata, eso, de un sitio para otro sin orden y sí con mucho desorden y pretendo que estas letras sean calco o parecido de lo que pienso cuando corro, no me esforzaré en darle forma ordenada, y ya sé que será en detrimento y claro rechazo de quién pueda intentar leer; pero, una vez más, igual que en el trotar busco y pretendo que sea ocio y no obligación; también ocio y no obligación quiero que sean estas letras; aún con la falta de coincidencia que habrá entre el hecho de correr con sus pensamientos y visiones respecto de las palabras que se escriben quizá horas o días más tarde, y por añadido la censura que yo mismo puede que hasta sin premeditarlo le aplique a las palabras escritas. Al menos tengo la plusvalía de que cuando voy corriendo mi alegría es más y tengo mejores pensamientos y más optimistas que cuando escribo, así que al menos en esto sí que hay claro error y diferencia entre correr y escribir;

    pero, qué os voy a contar a vosotros que seguro que así también os ocurre; claro salvo la excepción que pasado ese momento de excitación eufórica corriendo, empiece el sufrimiento, y lo digo porque lo he visto, y tanto que así el señor de talento cuestionable que llega a meta y la que lía porque le han dado demasiado pequeña la camiseta de algodón que en el mercado cuesta más de dos euros pero nunca más de tres y que es de publicidad y que se ha ganado con el sudor de la frente en esta prueba de inscripción gratuita, donde llegó en el puesto 668 de 707 corredores y mira que hay que ser sibarita, donde había sobrado y calculado y no de forma fortuita, plátanos agua isotónico policías y hasta enfermeros atentos en ponerte si te hace falta una tirita; pero los hombres son hombres y las mujeres mujeres, y ninguno de ellos piedras que puedan aguantar la dureza que exige el evento si siendo como son personas no están lo suficiente endurecidos como exige la que corremos en inscripción gratuita o no, y claro luego pasa que la euforia y alegría se ve empañada con comentarios de un corredor popular corpachón y sin exteriorizar cuando está en silencio su cuestionable talento y que termina quejándose en tono de mala hiel y diciendo, “eh que yo quiero mi camiseta para mí y no para mi hermanita”, y...
  • QuintilianoQuintiliano Anónimo s.XI
    editado septiembre 2009
    ...aquella carrera ya fue y vienen otras y quedan muchas por venir. Del tiempo pasado te queda el buen recuerdo, hala, ya estamos con la trascendencia, venga hombre, vivamos el presente. Y fue esta mañana cuando me despertó mi chica, a tirones en el brazo diciendo, pero no íbamos a hacer un trote de dos o más horas pues como no te des prisas va a hacer mucho calor. Y caí en el recuerdo remoto más cercano de hacía apenas unos minutos que había sonado el despertador, y lo apagué o desconecté enseguida y fue en ese preciso momento de apagar el despertador cuando me arrepentí de haberme acostado a las tantas de la madrugada, y me eché otra vez tumbado en la cama, y estaban ladrando los perros podencos galgos y algunos chuchos que también les llaman pachones de la barriada de cazadores de conejos liebres y perdices que a veces pero pocas cazan tórtolas mirlos y zorzales, que hay cerca pero no junto a mi casa, y me dije, al séptimo distinto ladrido de perro me levanto,

    y estaba tumbado atento oyendo concentrado en los ladridos, buscando que sean distintos pues en mi cuenta aunque un animal ladre muchas veces, solo computo un ladrido de cada perro distinto, y cuando estoy así de atento no me entero de nada más, aunque me hable mi chica, que me habla y por lo visto me habló mucho esta mañana sobretodo metiéndome prisas para no pasar calor, y que si bien pase algún avión por la vertical del etéreo espacio distante tal vez miles de metros que separa el punto superior del adorno más alto de mi casa que es el pivote vertical en forma de alcachofa enorme mirando al cielo que hay en la cúspide de la chimenea uniéndose en línea recta invisible con la panza del avión que pasa;

    y no recuerdo ni ahora ni en aquel momento en que me despertó mi chica cuántos ladridos tenía contados aunque creo que eran más de cuatro cuando perdí la cuenta por culpa del sueño; y cuando me desperté de segundas, di un salto rápido, puse el agua a hervir para hacerme un café soluble con más agua que azúcar y leche juntas, y saliendo de la cocina veo a mi chica en la puerta de salida de la casa, dando zapatazos en el suelo que aunque no eran pequeños eran casi silenciosos, y diciendo no con palabras sino con el gesto, ya verás que calor vamos a pasar y, cambiando el mohín de su gesto por pequeños resoplidos expulsando aire por las un poco demás abiertas fosas nasales y la boca y zapateando a la vez, y yo que no encontraba las zapatillas que más amortiguan mi pesada estructura de descendencia milinaria del mono con ramificaciones de tortuga evidentes en mi velocidad de carrera, que en no muchas décadas, y el mismo día u otros posteriores en que yo pase de ser presente a ser difunto, tal vez sea descubierta con identidad exacta en un laboratorio de un tanatorio provinciano donde emplearán técnicas aún hoy desconocidas; y...
  • QuintilianoQuintiliano Anónimo s.XI
    editado septiembre 2009
    .y cuando logro concentrarme en la apreciación de los elementos que me rodean, el camino, tamaño de la gravilla del asfalto, naranjos, melones, la mula atada en medio de la alfalfa con una jáquima que de grande casi se le sale por la cabeza y un cabestro muy largo, que tiene como única tarea alimentarse de alfalfa y soportar la calina de toda la mañana que casi la derrite al sol sin sombra alguna, que porque no habla, que si hablase (aquella excepción de una vez que vi una película en blanco y negro como no podía ser de otra forma entonces cuando yo era pequeño, que trataba de una mula que hablaba que iba con un soldado y estaban en una guerra y que me gustó mucho) diría que ella prefiere tirar del carro sacando los melones de en medio del melonar pues así al menos cuando descargan los melones está a la sombra donde hay menos moscas que le repiqueteen las orejas y la matadura, rozadura o desconchón que tiene en la piel del lomo a la altura de las patas delanteras; y de otros muchos animales sobre todo perros, muchos perros, más vagabundos que de los otros; y en la apreciación de personas que pasan, algunas andando, en bicicleta o vehículo de otro tipo, y no contándolas como las anteriores sino aparte y distintas, otras personas que pasan, no muchas pero sí algunas, dentro de coches grandes y ostentosos de cristales tintados en oscuro con gafas de sol que no se dejan ver y conocer; así que es en la apreciación de los elementos objetivos y no en las especulaciones moralistas o de otro tipo similar, donde mejor me siento cuando voy corriendo.

    También hay carteles, anuncios, de todo tipo, metálicos, de cartón, de madera, algunos escritos a mano, se venden naranjas limones sandías melones, se vende una potra con un año que no muerde ni da coces. De los que más, los de tráfico que se hacen vigilar y respetar ante los cuatro ojos de la Benemérita, y que antes siempre iban debajo de un tricornio negro brillante y que ahora van debajo de una gorra verde benemérita y que eran compañeros suyos los que cuando yo recién terminado y llegado de una prueba de correr que era y sigue siendo muy larga en Ronda (que se suda mucho aunque algunos además se hacen rozaduras, ampollas, lipotimias, pájaras y otros eventos que a veces les hacen abandonar, como así me ocurrió en la última edición) e iba yo ya saliendo de la ciudad en el coche para casa a las dos o tres de la madrugada, me pararon para hacerme la prueba de alcoholemia, el Sr. agente cuando me fue a meter una boquilla redonda blanca de plástico que de niño yo hubiese llamado pinganillo en la boca para soplar le dijo a su compañero, “este hombre oler huele bastante pero de alcohol ni rastro”, y retiró el artilugio y por tanto no me dejó soplar y dijo con tono de ser buena persona y quizá admirado o tal vez algo compungido pero no mucho de lástima por los que corren trotan o se arrastran por la sierra rondeña a esas y más tarde horas de la madrugada, “ande tire usted, que estará deseando ducharse” y...
  • QuintilianoQuintiliano Anónimo s.XI
    editado septiembre 2009
    ..el hombre que tiene las sandías sembradas en el km 3 del recorrido que hago trotando desde mi casa al trabajo se llama Antonio, aunque por aquí se le conoce con el sobrenombre “el Sargento”. Pero la historia de este sobrenombre, aunque me vino al pensamiento cuando iba trotando es mejor dejarla para otro momento, porque si con seguridad y no con la duda, voy a tener la ingrata sensación posterior a escribir esta retahíla que espero que nadie lea o si la lee que caiga en la seguridad y no en la duda de que me he ido por los cerros de Úbeda en el intento de decir o escribir sobre las cosas que pienso cuando voy corriendo. Aunque creo que no sé si me gusta que me lean o no, más adelante no sé lo que serán estas palabras impresas para mí, tal vez hasta me avergüence de ellas, pero esto ahora, ya digo para mí, no es más que una más y más que evidente forma de mirarme el ombligo, como ya dijo un forista que entrena en Zamora en las heladas mañanas de invierno de Zamora, y que yo pienso que su actividad en el foro ese de las letras moradas nunca fue mirarse el ombligo sino divertirse, pero ahora dice que no va a seguir escribiendo, lo que demuestra que es persona inteligente pues no está estancado sino en constante evolución, porque la llegada al sitio es una fase de la evolución de la persona como persona, y la ida del sitio otra fase más de lo mismo. Veis lo que me pasa, siempre me he separado de la lectura sobre teorías moralizantes, y afirmaciones en el mismo sentido, pero no sé porqué, aunque sin gustarme no cesan de venirme a los pensamientos cuando voy corriendo. Tal vez sea por el vicio, tendencia o tentativa, o facilidad que creo que tengo no por mi inteligencia, que creo que es bastante normalita, no, por eso no, más bien por el tipo de trabajo que tengo, el caso es que a veces me viene la idea de conseguir dinero fácil por la tangente, y es cuando tengo que calmarme, no dejarme llevar por los impulsos de estafador, y aplicarme en silencio para mí, pero con claro eco interno, una buena dosis de repaso a los diez mandamientos, o tal vez sin alusión a todos los mandamientos, pero sí a algunos de ellos. Cuando logro concentrarme en la apreciación de los elementos que me rodean, piedra, camino, asfalto, el grosor de la gravilla del asfalto y otras muchas cosas, personas y animales objetivas que llaman mi atención, y no en las especulaciones moralistas que he aludido antes, es cuando en realidad me siento mejor corriendo. Y a lo que vamos, siguiendo por el camino, veo los aviones aterrizar a lo lejos en el Aeropuerto de Málaga, en la mañana y detrás de los aviones, la Sierra de Mijas al fondo, detrás está el mar y detrás las montañas del Norte de África, que es el lugar donde ocurrió lo que tuvo que ocurrir para que al Sargento le llamasen ya siempre Sargento, y que él interpreta con modestia y mucho orgullo escondido en su silencio, y que otro día tal vez yo diga de que iban aquellos hechos. Siguiendo por el camino de mi casa a la oficina donde trabajo, por el asfalto y no por los caminos de tierra y polvo porque el polvo en el verano es asfixiante cuando voy sudando y con la respiración acelerada, y pasa un vehículo, normalmente un todoterreno que las más de las veces y las muchas, lleva prisas, y es asombrosa la cantidad de polvo que levanta. Y el conductor que se hace como el despistado, aunque alguna vez pienso en que parece que lo hace a propósito, porque a lo mejor es de los que me conocen más y mejor y dicen en silencio para sí, pero con sentido de burla o insulto, y no de admiración, “ay la leche que mamaste Juan” y...
  • DorchyDorchy Fernando de Rojas s.XV
    editado octubre 2009
    El fin de semana que viene salgo de viaje, un viaje muy atractivo y prometedor. Una ruta artístico cultural por el País Vasco, visitaremos todos los museos y casas museos desde Bilbao hasta el país Vasco francés y durante tres o cuatro días asistiremos a diferentes encuentros y charlas-coloquio con ocho o diez de los escritores vascos contemporáneos más representativos: todo un lujo. Ya os contaré... escribiendo en el foro junto a la playa de la Concha en San Sebastián/Donosti o San Juan de Luz, con el portátil y un buen txakolí sobre la mesa de la terracita de algún restaurante que me guste. Salud!

    Besos y abrazos
    Dorchy

    P.S. Si alguien vive o estará por allí en esas fechas y quiere que nos veamos que me mande privado, podemos encontrarnos, conocernos un poco y compartir charla literaria o no y un vinito o una cerveza... ésta la pago yo ok?



  • POLIXENAPOLIXENA Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV
    editado octubre 2009
    ¿Batalla perdida? Ayer decidí dejar de arañar, dejar el pasado donde está y seguir adelante aunque sea con las manos vacías, hoy estoy segura que volverán a llenarse. Cuando todo pase podré volver a pensar en el pasado, pero ya sin ganas de reprochar nada a nadie. “Las ganas locas de vivir y amar todo lo que haga”, con eso no han podido ni podrán. Algún día el monstruo que manejan se les escapará de las manos y pensarán en los destornilladores que tiraron. No voy a dejar de dormir por culpa de una multinacional… eso hoy lo tengo claro.
  • POLIXENAPOLIXENA Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV
    editado octubre 2009
    Llevaba muchísimo tiempo sin escribir algo, pero me apunto una pequeña victoria en mi batalla particular. Si escribo es porque algo todavía sigue ahí... Poli, Poli, acabarán pasando estos días malos, regulares, pero nunca pasaran vacíos.
  • APOSTOLAPOSTOL Anónimo s.XI
    editado octubre 2009
    Otro comodo dia termina sin risa ni llanto un dia automata.La niña del salon de belleza esta sediendo a mis pretenciones, bueno eso creo :D
  • POLIXENAPOLIXENA Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV
    editado diciembre 2009
    A veces veo la luz...pero se apaga rápido... ¿opciones? Aguantar con lo que tengo o salir corriendo. Tal vez sea hora de reconstruir...
    Xoel parece entenderlo muy bien.

    Reconstrucción
    Es el mejor momento,
    sentir, cambiar de nombre tantas cosas
    y olvidar algunas caras
    en el cementerio del pasado.

    Es el mejor momento,
    reconocer, sentir a veces tanto miedo,
    y entender que justamente
    ése es el gesto más valiente.

    Y aceptar que no todo es tan fácil
    y que no siempre los huesos
    aguantan el peso,
    reconstrucción.

    Es el mejor momento,
    asumir que toda sabiduría y experiencia
    no resisten a veces
    la fuerza de algunas corrientes.

    Es el mejor momento,
    comprender, no poder ganar todas las veces
    y entender que ésa es la llave
    hacia un camino más amable.

    Y aceptar que no todo es tan fácil,
    y que no siempre los huesos
    aguantan el peso,
    reconstrucción.

    Y aceptar que no siempre es tan fácil,
    y que no todos los huesos
    aguantan el peso,
    aguantan el peso,
    reconstrucción.


  • Dixie_DregDixie_Dreg Juan Boscán s.XVI
    editado febrero 2010
    Hoy cierro un ciclo, aunque, no se si llamarle ciclo, apenas creo que llegó a un cuarto de cuerda, pero bueno, espero que les alcance.

    Hay cosas que nunca cambian. Las mismas caras de cartón, las mismas pequeñeces, la misma falta de grandeza, los mismos egoísmos, las mismas máscaras...

    Y la espiral debe de ser ascendente. Es tiempo de volar...
  • serranaserrana Juan Boscán s.XVI
    editado febrero 2010
    Dixie, es cierto que hay cosas que nunca cambian como las que mencionas, hay quienes nunca cambian. Pero tal vez puedas dejar de darles tanta importancia y prestarle atención a quienes sí exhiben grandeza, que también los hay. Y el resto, que ruede.
    Tu lo has expresado muy bien en algunos textos. De alguna forma todo es sueño. Por eso encuentro muy acertada la frase "aquello en lo que te concentres determina como es tu mundo".
    Ojalá que el nuevo ciclo que inicias buscando vuelo te traiga lo que anhela tu corazón.
    Un abrazo, amigo. Te deseo lo mejor. :)
  • ShaiantiShaianti Fray Luis de León XVI
    editado febrero 2010
    Otra vez tendré que viajar.

    "Partir c'est mourir un peu,
    c'est mourir à ce qu'on aime..."
  • Miguel Monte RealMiguel Monte Real Gonzalo de Berceo s.XIII
    editado febrero 2010
    Si alguien aquel día perdió, ese fui yo.
    Si alguien aquel día ganó, ese fui yo.
    Si alguien ese día pensó que un beso
    iba a sellar el final de una relación,
    ¡Dios mío, cómo se equivocó!
  • isabel veigaisabel veiga Garcilaso de la Vega XVI
    editado febrero 2010
    Yo estoy ahora en un dilema, aunque no debería preocuparme hasta finales de la semana que viene porque puede que todo salga bien por sí solo y no habría sido necesario darle tantas vueltas. Pero no puedo dejar de pensar en qué hacer, qué elección será la adecuada -si es que tengo que elegir-... En fin, cuando sepa algo más ya os contaré. Es una cuestión laboral.
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