Hola a todos.
Cuelgo este tema aquí, pero si algún moderador considera que debe estar en otro sitio lo puede cambiar, pues no sé muy bien dónde ponerlo.
El relato de un compañero del foro me ha hecho pensar (pero poco, que luego se me gastan las pocas neuronas funcionales que me quedan). Me ha hecho preguntarme cómo vivimos y cómo sentimos el tiempo. Bueno, me ha hecho pensar su relato y una conversación con una amiga. En la conversación ambas queríamos que pasase el tiempo un poquito más deprisa. En la misma conversación ambas tenía mos sensaciones distintas ante dos semana atrás. Mismo tiempo, diferente longitud.
Pensar en ello me trae a la mente muchas preguntas para mí misma y para vosotros.
Por un lado está la cuestión de cómo sentimos el tiempo. A veces me parece muy lento, que las agujas del reloj casi ni avanzan. Otras veces lo siento demasiado rápido, se me escapa de las manos como el agua y no lo puedo retener. Es evidente que la diferencia está en cómo me siento en esos momentos, que depende de si espero algo o de si estoy disfrutando de algo, o de si quiero hacer muchas, demasiadas cosas tal vez. Pero en general, a grandes rasgos, mirando hacia atrás, el tiempo se me hace muy rápido, pasa a mi lado y no me doy ni cuenta, sólo cuando miro atrás, muy atrás.
Por otro lado está cómo utilizamos ese tiempo, en qué lo invertimos. Yo a veces pienso que no lo aprovecho lo suficiente o que no lo invierto en lo que debería.
Os animo a comenzar un debate en el cual compartir nuestras experiencias y conocimientos sobre este tema.
¿Cómo experimentais vosotros EL TIEMPO?
Comentarios
Hoy, en cambio, cada minuto pesa una tonelada. El reloj no se mueve. Se ha parado y parece que hace siglos que amaneció. Espero y desespero.
Son las circunstancias las que nos llevan a vivir el tiempo de una u otra forma.
También la edad. De niños o jóvenes parece que nunca vas a crecer. Que nunca llegará esa edad en que podrás hacer lo que quieras (je, je, eso te crees entonces):rolleyes:. Pero con los años, te encuentras con que todo se acelera. Se te van las prisas por celebrar el siguiente, y sin embargo, llega veloz a recordarte las décadas que has dejado atrás.
El Tiempo es el diario de nuestra vida donde escribimos acontecimientos que nos han resultado felices o nos han llenado de tristeza.
El Tiempo siempre surge en esos momentos como un angel o un demonio al cual le pedimos que permanezca a nuestro lado o se vaya para siempre. Siempre presente y lleno de poder, le hemos adorado, condenado, personificado, insultado, convertido en deidad, hasta hemos intentado controlarlo...
Un beso, un gesto, una palabra, todo es tiempo, pues sin él nada existiría. Todo contiene un principio, nada es inmediato... el recorrido es el Tiempo.
Incluso Dios (de existir) está sujeto a unas formas: al Tiempo. La voluntidad divina, la voluntad misma, está sujeta a él pues entre la causa y el efecto existe un camino. La longitud de un pesamiento es el tiempo. Nada es eterno y esa es nuestra condena existir para él, para esa dimensión que nos subyuga.
Propongo no llamar al Tiempo, no llamarlo nunca más. No pedirle nada. Sólo vivamos el momento sin preocuparnos de su fin.
Un saludo
En general siempre se me ha pasado muy rápido, aunque esto último depende de si mis deseos son satisfechos o debo esperar a que se satisfagan.
En algunas ocasiones, o quizás en muchas, me pongo en el futuro porque pienso "Este momento es transitorio. Va a pasar y esto que está ocurriendo es relativo"... creo que tengo una actitud algo existencialista con respecto al tiempo, y cuando oigo o me dicen "esto es para siempre" o "este libro será eterno" "esta pintura se contemplará por toda la eternidad"... ¿Eternidad de cuanto tiempo? me respondo a mi mismo y sonrío... joer, no sé muy bien cómo explicarlo... pero el tiempo y la vida es algo que se me escapa a una velocidad increíble, sobre todo los momentos buenos.
¿Alguien ha pensado alguna vez qué es el "no tiempo"?...
En fin voy a dejarlo, creo que me sale humo del coco y es tan misterioso todo esto que no puedo ni siquiera expresar lo que siento.
César
edito: quería comentar que si el futuro no existe, el pasado tampoco y el presente es una continua sucesión de momentos que inmediatamente se transforman en pasado... ¡Dios! entonces... ¿no estaremos soñando?
Cuando era chiquitín, pasaba tremendamente despacio. En mi juventud, igualmente era algo que transcurría con lentitud. En mi madurez, joer, que se me escapa de las manos y solo me encuentro en Navidad, luego otra Navidad, o Vacaciones, otras vacaciones, me pasa el tiempo volando.
Ahora bien, el día a dia es tremendamente complejo y depende mucho del ritmo de trabajo, de la cotidianidad y naturalmente de mi estado de ánimo.
Interesante hilo amiga. Ahora tengo prisa, luego me meto más a fondo.
Sin tiempo no hay vida, todo se termina.
Vivamos cada momento como el mejor, yo pienso que el tiempo es nuestra constante elección...elegir nuestro camino ..es elegir nuestro tiempo..
Nuestro paseo por la vida..no nos permite llevar maletas..asi que experimentamos cada momento como el unico y este no volverá...
Imposible detener el tiempo, imposible acelerarlo..maravilloso vivirlo en plenitud..y valorarlo.
un abrazo,
El tiempo, para existir, requiere de alguien que lo perciba.
Está la fantasía, bastante común, de creer que con el cese de nuestro tiempo acaba el tiempo del mundo.
El tiempo, dice Borges, es una creación humana, ya que los animales sólo viven en presente. Además, el tiempo siente horror por el presente, por eso se convierte inmediatamente en pasado. A partir de aquí, todo es pasado. Estamos construídos de pasado, no necesariamente del nuestro.
Los sentimientos están atados al tiempo: el rencor y el olvido al pasado, la esperanza y el desasosiego, a lo que vendrá. El presente es, quizá, un estado de receptividad, una fracción cercana al cero absoluto.
He deslizado dos errores: hablar de fracciones, como si el continuum del tiempo fuese susceptible de ser fraccionado y mencionar algo absoluto, término por demás relativo.
El tiempo es una representación mental que no puede ser compartida; porque nunca hablamos de "el tiempo" sino de cómo percibimos su decurso. Quizá por aquel axioma de que "el mapa no es el territorio"
Por eso, el tiempo literario, flexible por obligación, permite viajar al pasado, al futuro o a un ilusorio presente (que nunca es tal). Mientras, para el lector, el tiempo del mundo y el suyo siguen adelante. Uno por toda la eternidad, otro por un rato, nada más.
Intuyo que estas divagaciones son formuladas apresuradamente, quizá por no dedicarles más tiempo.
Walter
Cada día, en cada página aparecerá una historia, imágenes, nombres, fechas.
Según corre vuestra vida el libro se va completando. Vuestras vivencias, vuestras expectativas, vuestros logros, la felicidad, la desgracia. Momentos irrepetibles que quedan grabados allí para siempre.
Cada día tendrá su propio encabezado. Mis padres, mi bautizo, mi comunión, mis amigos, mi colegio, mi boda, mis hijos, etc, etc.
Imaginemos un día en el que el libro se nos manifiesta y podemos pasar páginas, ver el paso del tiempo, recordar aquéllos momentos inolvidables que en otro tiempo fueron presente y que vivimos con emoción, alegría o pena. Por unos instantes el tiempo se detiene porque el libro nos hace volver a vivir las sensaciones de aquélla fecha.
Y, lo mejor de todo, aún quedan páginas en blanco. Aún podemos hacer más, mejorar, rectificar, seguir viviendo.
Todos nacemos con el regalo del Tiempo que se irá transformando en nuestra vida. Vivir estos minutos, horas, días, semanas... será algo que dependerá de las circunstancias que nos rodean y de lo que ese tiempo nos vaya poniendo por delante. Decisiones que irán formando el futuro, porque ellas traen sus consecuencias. Aciertos y errores que con el tiempo se verán reflejados en nuestro libro mágico.
Sí, el tiempo pasa deprisa. Se nos escapa de las manos, pero se queda en nuestra memoria y en las vivencias que forman nuestra vida pasada, presente y consecuentemente, futura.
Y, a veces, en un momento dado, un giro inesperado en cuestión de segundos puede hacernos ver ese tiempo diferente. Más grande, más importante, más real. A veces, el tiempo se nos hace tangible porque las circunstancias nos dicen: Vive hoy, mañana es demasiado tarde (una bonita frase que alguien dijo una vez).
A veces pensamos tanto en el futuro que nos olvidamos de nuestro presente, y esto, esto si puede ser una pérdida de tiempo.
El tiempo existe porque el ser humano tiene el poder de pensar/teorizar sobre el.
Pero es de las pocas cosas que existen que no podemos manipular.
Nuestro cerebro puede saltarse el tiempo (sueños) o estresarse ante su lento paso (horas de trabajo). En los sueños no lo tenemos en cuenta, pero en tareas tediosas si.
El cerebro de un comatoso es otro ejemplo.
Entonces el tiempo solo existe en las mentes de quien tiene consciencia de el.
Y no solo eso, si no que vivimos en una amoldada escala de tiempo.
Recordemos que es un año. Una vuelta de la tierra alrededor del sol, ni más ni menos.
A mí el TIEMPO nunca me llega para nada, cuando descanso, me falta tiempo, cuando trabajo, se me acaba el tiempo y me sobra el trabajo, cuando me divierto, pasa tan deprisa que me deja con la sensación de no haberme divertido bastante, cuando sufro, pienso en mi sufrimiento y cuando me restablezco de él me doy cuenta de lo mucho que he sufrido en poco tiempo.
Cuando espero a una mujer, vivo la cita mientras ella no llega y cuando llega, me sorprende pensando en ella y con la noción del tiempo perdida. Cuando estoy con ella, llega el momento de irse y me parece que acabo de recibirla y a sí me ocurre con todo, el tiempo conmigo se ha resignado a ser mi sombra, y me acompañará al otro barrio, allí me tomaré la vida de otra manera y quizá trataré de entender porque el tiempo escribe nuestra caducidad.
Siempre ha sido mi enemigo.
También influye que cuando uno está feliz (o al menos es mi caso) siempre estás con ganas de hacer cosas, con lo cual, estás más ocupada. Cuando estás triste, la apatia te acorrala y no te apetece ni moverte, con lo cual, pasa más despacio.
En fin, esa es mi opinión.
Sin embargo, mi vida, el desarrollo de mi cuerpo ( esta vez) carece de prisas , me percibo como una expresión de lo que puede mantenerse inexpresado o explotar en secuencias de vida.
Dentro de este ser así florezco o menguo naturalmente, es decir, estoy atenta a mis necesidades y concedo mi sonrisa al llegar puntualmente a las citas aunque sin apuros.
El Tiempo es el Universo que cambia.
El Tiempo es Todo en constante movimiento. No podemos separar el tiempo de los sucesos: éstos "marcan el tiempo". El reloj es una máquina que produce una sucesión de saltos o lapsos lineales, produce sucesos regulares gracias a los cuales nos hacemos una idea abstracta de Tiempo.
Pero, como decía otro contertulio, el mapa no es el terreno y el reloj tampoco es el Tiempo, aunque lo represente de forma abstracta del mismo modo que los números representan la realidad.
El Tiempo natural o real no tiene otra medida que la medida de los sucesos. El reloj es una maquinita que produce una abstracción del Tiempo. El Tiempo real es tan variable y elástico como los sucesos. Los minutos del reloj son al tiempo real lo que los números del matemático son al flujo de un río.
La física astronómica no concibe el tiempo independientemente: Espacio-tiempo. Para la física cuántica, el tiempo que una partícula tarda en girar es inmedible en cantidades exactas.
¿Qué es el Tiempo? El Tiempo es arena, es cifra vacía. Es Todo y es Nada.
Dicen que algún día el Universo se habrá convertido en una inconmensurable extensión vacía y oscura. Las últimas estrellas se habrán apagado, los agujeros negros habrán terminado de expulsar toda la energía que absorbieron, agotándose. Ya no habrá nada que se mueva o cambie. ¿Existirá entonces el Tiempo?
Sólo si aún quedase algo por suceder. Pero si ya no hubiera más sucesos, ya no habría más Tiempo.
Es cierto que, según la edad, el tiempo se percibe de forma distinta. O mejor dicho, el niño no es consciente del tiempo, pero el adulto "recuerda" que el tiempo del niño era más largo. Es, efectivamente, una cuestión de percepción. Creo que puede explicarse del siguiente modo: un niño aprende mucho más que un adulto por la sencilla razón de que tiene mucho más que aprender. Entonces el tiempo de un niño estará más lleno de eventos registrados=aprendidos. Estará más lleno y por tanto parecerá más largo. Un adulto, sin embargo, no tiene que registrar diariamente tanta información nueva. Muchas cosas ya se repiten en su vida. Por tanto su tiempo estará menos lleno de eventos registrados, habrá otros muchos que ignorará porque son eventos repetidos, de modo que el registro global del tiempo se acorta, y el tiempo "pasa más aprisa".
Esto lo comprobamos cuando salimos de viaje y visitamos un nuevo lugar. Los días se vuelven mucho más largos: están más llenos de nuevos eventos que deben ser registrados, en comparación con un anodino día de nuestra vida normal.
El no-tiempo es algo distinto al tiempo, incluso al tiempo que transcurre con lentitud. Si te encerraran en una mazmorra oscura, sería como si te introdujeras en un estado de no-tiempo. Quizá no tan curiosamente, el no-tiempo se aproxima al tiempo lleno de eventos, parece pasar tan lento como éste, pero sólo en el presente. En el recuerdo no sería nada, sería una extensión vacía, un no-tiempo.
Por lo demás, nunca me gustó llevar reloj.
Un saludo,
Catulo
Yo tampoco los uso..me encanta vivir sin tiempos.
Cuando viajas no es lo mismo cuando vas que cuando vuelves.., (las distancias y los tiempos se alargan o acortan y esto se debe a si viajas en contra de las agujas de reloj o a su mismo sentido.
Esto es la famosa teoria de la relatividad..que matematicamente esta comprobada - es tan dificil de entender.., es que esto nos lleva a la posibilidad de poder viajar al pasado ..aunque parezca todo de pelicula.
Cuando observamos el firmamento cada estrella nos representa el pasado..y muchas de ellas ya no existen..
Tal vez como tu dices mi querido Catulo.., el tiempo es todo y es nada..porque en realidad esta ideado por nosotros mismos ..por nuestros espacios y hasta por las posibilidades de utilizarlo ...
un abrazo,
pues fijate que no se porque?no logro poner la foto mas grande..,pero veo que de todas formas me ven bien..sera cosa de usar lupa...
Piensas que las distancias..tienen que ver con el tiempo..?..
Yo creo que acercarse..o alejarse es cuestion de tiempo...y que el tiempo puede provocar o arreglar muchas cosas.
un abrazo,
Cuando era pequeña mi madre me decía no pierdas el tiempo y estudia. Pero se equivocaba el tiempo nunca se pierde, se INVIERTE... en otras cosas. La cuestión sería ¿vale la pena esa inversión...? pues también depende de cada uno de nosotros lo que para ti no es una buena inversión para mi puede serlo y viceversa.
Lo que si puedo asegurar es que no me gusta que jueguen con mi tiempo. Me molestan las esperas… salvo que esa inversión signifique una charla agradable con otra persona desconocida.
Saludos.
Me agrada comprobar el interés mostrado en este tema por tantos y tan variados foreros. Más me agrada comprobar al leeros que, a pesar de las diferentes formas de expresarlo, casi todos decimos lo mismo.
Cuenta, parece que me hayas estado escuchando los pensamientos cuando dices que el tiempo no se pierde si no que se invierte.
Así pues, y dado que parece común también ese interés en vivir hoy, en aprovechar el tiempo, sifgamos invirtiéndolo en aquello que nos agrada y que merece la pena.
Un saludo, ha sido un placer leeros a todos juntos.
Y valoro, sopeso el tiempo que se congela en una pintura, en una obra de arte, la circunstancia, la impresión y el detalle plasmados en un color y en una forma hasta que volvamos a dar una vista...