Acabo de matar a un señor de cien años. Sí, han leído bien. Ese era mi pensamiento mientras destrozaba su cabeza contra la pared.
No me resultó tan desagradable como temía. Supongo que es por el hábito, que, si no hace al monje, al menos lo acostumbra a estas maitines de primavera cálida, muy cálida.
En cierto modo ha sido una decepción. Esperaba un escalofrío al oír cómo se rompía su débil esqueleto, pero no, ni eso. El acto fue rápido, pulcro e indoloro, para mí, claro. Tampoco es que me entretuviese en preguntarle su opinión. Lo mío fue como otras veces, un acto reflejo. No pude evitarlo al ver su imagen repulsiva junto a mi cama.
Entiéndanme, yo no hago estas cosas por gusto, aunque resulte placentera la sensación de victoria al ver su cadáver sobre la alfombra. Es más una cuestión estética. Desentonaba. Sí, su imagen desentonaba con los colores pastel y las formas suaves de mi cuarto. ¿Qué pensaría la gente si me viera con semejante esperpento ahí plantado? Eliminarlo era una necesidad vital.
No me detuve ni un segundo a pensarlo antes de lanzar mi mano contra él. Ahora me doy cuenta de lo débil que estaba. Por eso fue tan fácil. No tuve que perseguirlo, como suele suceder. Se estuvo quieto. No me vio venir. Quizá esperaba la muerte o la buscaba al mostrarse así ante mis ojos. Quizá ya estaba cansado de vivir.
Al verlo ahí tirado patas arriba, pienso en lo duro que debe haber sido para él pasar cien años encerrado en ese cuerpo asqueroso. En cierta forma soy su salvadora. Debería agradecérmelo. Gregor Samsa ya es libre.
(En marzo se cumplió el centenario de la publicación de "La metamorfosis")
Comentarios
Un buen homenaje al centenario de una obra que nos ha marcado tan a fondo.
Saludos,
Marcelo
El homenaje se lo hizo la 'cuqui' que se me coló esta mañana. Descanse en paz.
Esta es mi interpretación, pues casi, casi llegue a sentir cierta locura en el texto.
Me gusto mucho, una buena narrativa, corta pero intrigante.
No se a que evento se refiere, pero me gustaría saber más de su relato.
¡Oh!, mi querida amiga Ana (Gades), no sabía yo que se te daban tan bien estos cuentos de terror. ¡Y muy requetebién que los detallas!
No había visto antes este escrito tuyo porque precisamente en mayo del 2022 estaba yo en el hospital, sometiéndome a una operación quirúrgica delicada, de la que ya te dije algo, aún sigo medio convaleciente, pero ahí vamos, casi bien, aunque aún me tienen que hacer curas dos veces a la semana.
Bueno, a lo que iba. Resulta que no sólo escribes poesías y escritos de otras temáticas, sino que también historias tétricas como esa. Me ha gustado un montón.
Por cierto, ¿cómo vas en tu nueva vivienda? ¿Y tus estudios de correctora? Por otro lado, permíteme que te eche una bronca porque te ausentas demasiado del foro. Todos los días me encargo yo solito de darle de comer a tu hilio "De tortas y café". Chiquilla, échale de vez en cuando, aunque sólo sea un trocito de pan
Un fuerte abrazo
Hola, soASO
He leído tus comentarios al escrito "El crimen" de Ana (Gades), y decías que te gustan los escritos de ese tipo, concisos pero con acción. Pues ahí te dejo al pie un enlace de un escrito mío, que es también de terror, pero no precisamente sentimental. Puedes dejar, si quieres, tus impresiones en el mismo hilo.
Un saludo
https://www.forodeliteratura.com/f/discussion/38523/sucedio-en-la-sala-de-llegadas-del-anden-10#latest
Tan sencillo es el tema como que al despertarme una mañana encontré una cucaracha en la pared junto a mi cama y tuve a bien matarla. No sé como hiló mi mente para asociar tal hecho con la Metamorfosis de Kafka. Y sí, de vez en cuando en mis relatos me da por matar gente.
Un saludito.
Lo demás... bien, requetebién.