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Cabeza de Juan Bautista con Alambre de Oro en la Boca sobre Bandeja de Plata con Cuatro Repugnantes

editado abril 2013 en Poesía Mística
Cabeza de Juan Bautista con Alambre de Oro en la Boca sobre Bandeja de Plata con Cuatro Repugnantes Cabezas de Guajolotes o Pavos Domésticos Cortadas.

Cuatro espantosas cabezas de Meleagris gallopavo
Recién ejecutadas con una cuchillita, ensangrentadas
Con sus verrugas repugnantes y su aspecto deforme
Para guarnición de la apostólica testa sacratísima.

San Juan masca flores de oro, flores de alambrada,
Y la agónica boca traga alambre de espino,
Dorada la impostura del éxtasis Bautista, divino,
Mientras sus ojos verdes ven a Salomé desnuda.

La hembra perniciosa mueve sus caderas, irascible,
Y danza para un Herodes ocupado en mirarla,
En la mesa la bandeja con las cabezas cortada

Como en un holocausto de aves y de ríos.
San Juan, ¡¡¡¡¡qué horrible verte entre los guajolotes,
Entre tanta verruga mascando zarzas de oro¡¡¡¡¡¡¡.

Y en la oscura celda el cuerpo sin cabeza del Santo cercenado
Se adorna con las mil plumas de los pavos comunes.
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Francisco Antonio Ruiz Caballero.

Cabeza de Juan Bautista con Alambre de Oro en la Boca sobre Bandeja de Plata con Cuatro Cabezas de Pavos Reales Arrancadas de Cuajo.

Pero qué cruel y maligna Salomé la bailaora
Que embruja a Herodes rey mientras Judea duerme.
El Palacio de Herodes se adorna con antorchas
Y Juan semidesnudo sueña con mariposas.

Ella pide la muerte del profeta cautivo
Mientras se quita el velo que le cubre los senos.
Y el hacha busca a Juan que sueña mariposas
Inachis Io con los ocelos verdes.

En la bandeja siniestra está ya la cabeza
Y los ojos del Santo, los ojos esmeraldas
Contemplan el aspecto de cuatro cuellos turquesas

Recién decapitados de cuatro pavos reales.
Y el Festín en el Palacio comienza con la danza. Magnífica.
Y Pavo real al Horno en salsa de frambuesas.

Pero Juan sólo come áureas zarzas de espanto.

Los esclavos de Herodes beben tinto y almíbar.
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Francisco Antonio Ruiz Caballero.
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