¡Bienvenido/a!

Pareces nuevo por aquí. Si quieres participar, ¡pulsa uno de estos botones!

Describe la situación

2»

Comentarios

  • Hoy necesito escribir sobre el día en que por primera vez le vi acercarse a mí entre la gente. Todo en aquella marabunta de cabezas, piernas, pasos y colores en la ancha avenida dejó de existir. Le distinguí por su forma de caminar; en realidad bailaba, bailaba sin hilos como el hombre que ha aprendido a danzar antes que a andar… sin saber que cada vez que da un paso está parando el tiempo. Comprendí que era un mago, uno entre mil, de los que sólo con estar aparecen. Él era presencia de fuego y tempo contenidos mutuamente, basculando, respirando. El ritmo que marcaba su cadera de lado a lado rompía la rudeza del asfalto, desafiaba por instantes al mundo y al universo. Tras las gafas de sol, era mirada alada de espejo en la sonrisa. 


    Hoy necesito escribir sobre ese primer abrazo que nos dimos, el primero en nuestras vidas sin un para qué. No sé si fue tímido pero se hizo fuerte, o si lo hicimos naturalmente osado en mutuo acuerdo de instinto. Lo de enredarnos a besos vendría más tarde, frente al crisol de luces en las fachadas que nos dieron abrigo. La plaza, la Plaza Mágica, se convirtió en nuestra sin que fuera secreta, sin que lo planeáramos en absoluto. No sé cuánto tiempo estuvimos cruzando abrazos y besos obscenos mientras varios niños jugaban a tan sólo unos metros, pero recuerdo que yo me sentía inocente en lo profundo de mí, en todo lo prohibido de mí. 


    Entre besos le miraba y sus ojos eran estrellas de curiosidad infinita. Nunca nadie me había mirado con esa curiosidad. Y supe así que eras mi sueño, porque resulta que, tras pasarme la vida pidiendo deseos a las estrellas, una gigante roja había venido a mí. 

    @ItsMorgannn )


    -Siguiente tema: "un juego".


  • No hay momento en el que no recuerde ese primer día que nos vimos en persona. Estaba sentado en la parte de atrás del autobús 521 con unos nervios terribles mezclados con unas ganas tremendas de llegar ya, porque sabía que tú ya estabas allí.

    Recuerdo cuando bajé del bus y vi que me habías mandado una fotografía donde salía dónde estabas. Recuerdo bajar esa enorme calle llena de gente pegado al móvil, escribiéndote porque había demasiada gente y no quería pasarte de largo sin querer, y entonces...entonces me dijiste que ya me veías, y cuando levanté la mirada me diste el abrazo más puro y especial que me habían dado jamás. Habías venido corriendo así que tenías el corazón acelerado, y el mío también lo estaba porque no me creía que aquello estuviera pasando, pero de un momento a otro los dos corazones empezaron a latir al mismo ritmo y eso fue precioso.

    No hay día que no recuerde esa mágica noche en la que la ciudad estaba más viva que nunca, y ahí estábamos nosotros, sin poder separarnos a pesar de tener que hacerlo.

    No quise mirar atrás cuando nos despedimos en el metro porque dolía demasiado alejarme de ti. Desde ese día, desde ese primer abrazo...supe que no podía separarme de ti nunca más. 

    Supe entonces que nuestros corazones no podían alejarse, porque cuando salí de la estación del metro sin ti, mi corazón lloraba como un niño que tenía que irse después de jugar en el parque.

    Comprendí entonces que con ese primer abrazo, cuando ambos latidos se transformaron en uno, nuestros corazones estaban jugando como críos, y nosotros estábamos viviendo de nuevo esa emoción que seguro ambos habíamos olvidado cómo se sentía...cuando todo está bien, cuando nada puede hacerte daño.

    Te amo <3

    Siguiente tema: "Una pulga"


Accede o Regístrate para comentar.


Para entrar en contacto con nosotros escríbenos a informa (arroba) forodeliteratura.com