Ven
Ven a mis sueños en flor
con tus brazos ausentes,
con tu mirada ciega,
¡pero ven!
Ven con tu música callada,
con tu corazón lejano,
con tus palabras mudas
soltando su veneno.
¡¡Pero ven!!
Ven a mis húmedos valles
y acaricia mi cuerpo
con mirada encendida
y con besos perversos.
¡¡Pero ven!!
Ven, púdicamente amigo,
con sonrisa en los labios
y tu gesto neutral ,
a tomar un café.
¡¡Pero ven!!
Octubre,013
Comentarios
Creo que solo eso cambiaría de tu poema ... pero es cosa de gustos.
Saludos
Como si te hubiera oído, vengo como amigo y admirador de tus versos.Hay varias formas de venir y, cuando el deseo de ver a alguien apremia, venga de una forma o de otra, siempre es bien recibido. Eso es lo que me dice tu poema.
Contrariamente a lo que opina Trasgo sobre la insistencia, yo creo que esa cadencia de "Pero ven" al final de cada estrofa, refuerza la idea de que no importa tanto el nivel de intimidad del encuentro, como el hecho de encontrarse, de poder verse, de oírse; en definitiva, de acabar con la ausencia.
Me ha gustado; es como un grito urgente, una llamada desde la añoranza.
Un afectuoso saludo.
¡Ah, qué bueno tu café con galletas, Amparo! A ti no te digo "Ven" porque nunca te has ido.Tú siempre acompañas.
Un abrazo.
Tienes razón en que hay una excesiva insistencia, pero es intencionada porque pretendo expresar que lo que desazona es la ausencia y que lo que se desea es acabar con ella, sentir la presencia en cualquiera de sus modalidades, por eso a la llamada "¡Ven"!, precede el "pero".
Gracias por tu opinión. Me alegro de que vuelvas por aquí, duendecillo.
Sí, es una llamada urgente; lo percibes bien, Leos.Se reclama la presencia,fría, calurosa,indiferente,velada, como compañero,como amigo, como amante, como sea, pero salir de la ausencia.
Gracias por detenerte en el poema. Como le digo a Amparo, a ti no hace falta decirte:"¡Ven"! porque siempre estás aquí. Y te lo agradezco.
Con mi afecto, un saludo.
He estado leyendo para ponerme el día de tus nuevos partos, Sinrima. Encantada de haber encontrado por aquí esparcidas esas ideas fantásticas a las pones música.
Me he parado en este para expresarte mi sintonía.
He sonreído después de disfrutarlo, imaginando que lo había escrito yo, en el supuesto de poseer tu talento ( ya que imagino, me doto sin límites, ja), porque en cada Ven me ha venido a la cabeza un ponzoñoso Vete.
Un abrazo, me hace disfrutar mucho leerte. Sigo.
Gracias por valorar mis versos y dejarme palabras amigas.
Me has hecho reír con la sustitución que haces, acorde con alguna amarga experiencia. Es difícil decir ¡"Vete"!; mucho más que "¡Ven!", pero hay veces en que es bueno, para nuestra salud mental, decirlo.
Pero quedaría un poema trágico , de despecho; de esos que, aunque los escribiera, no los publicaría en ningún sitio.
Bueno, que sigas viniendo por aquí.
Un abrazo.
porque el dolor es más íntimo que la alegría,y no solemos compartirlo verbalmente.Solo la presencia real puede delatar ese secreto, si el que observa tiene una aguda mirada.
Disculpa si es una intromisión en tu respuesta, pero sentí necesidad de comentar esta reflexión.
Saludos.
No cabe disculpa alguna.Lo que dices es también lo que yo pienso.Lo que duele de verdad está tan adentro que es difícil sacarlo al exterior y mostrarlo.La literatura nos ofrece la posibilidad de sugerirlo y así respiramos.
Gracias, Leos. Me ha gustado tu intervención.
¡Pues te aseguro que se resiste. Y largo y tendido!
Gracias por tus palabras; sonreí y eso es bueno.
También este me gusta. Es de otro ritmo y estilo, pero está muy lograda esa llamada insistente y los diferentes modos de presentarse el ausente.En los primeros versos hay insatisfacción, velados reproches, pero aceptación de que ocurran cosas así. En la penúltima pones pinceladas de erotismo y en la última vienes a decir algo así como"no me como a nadie", hombre; venir a tomar un café es de lo más natural". Y me he reído con "el gesto neutral", que, comparado con "la mirada encendida" de la estrofa anterior, adquiere un significado especial.
Bueno, me voy a dormir, pero no dudes de que seguiré viniendo "con sonrisa en los labios".
Un abrazo.
Un abrazo.
Escuche una vez a Zurita decir que "el infierno era inescribible", que era tan doloroso que no se podía plasmar en letras, por que la palabra hablada no alcanza, menos por cierto la escrita... (ni siquiera una onomatopeya alcanza) ahora si podemos escribir, es por que no estamos en el infierno y por lo tanto si se puede salir de ese sentimiento las letras...
Todo se puede compartir
Saludos
Bueno, no niego rotundamente que el dolor no se pueda compartir; se puede, pero no públicamente,sino muy en privado y con personas íntimas. Y, aún así,creo que tendría reservas.
Pero depende de la forma de ser de cada uno. Hay gente que lo exterioriza todo y otras que se reservan mucho.
Duende de los bosques, me alegro de conversar contigo.
Julio Armando, ¿dónde estabas metido durante tanto tiempo?. Me alegro de encontrarte. ¿Y tus poemas?. Siempre me gustaron y por eso tu nombre no lo he olvidado.
Gracias por tu saludo y comentario.
Otro fuerte abrazo para ti.
Yo no he publicado nada (editorialmente, se entiende).Creo que se lee más en los foros.Tendría que ser un libro genial para que tuviera un elevadísimo número de lectores, y no es mi caso.
Además, el mundo editorial tiene mucha tela y la publicidad y el estrés al que someten al autor, no va conmigo.
Un abrazo, amigo.