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Estoy cansado de escribir solo por escribir y no sentirlo, no pienso volver a escribir sin sentido, a menos que el sentido de mi escrito para mí tenga un sentido.
La vida está jodida, y quién lo dice no soy yo, son las voces calladas de personas inocentes que mueren a diario, solo porque un ser humano se sintió con derecho de arrebatarle la vida a otro ser humano, esa mierda que se ve a diario en noticieros y redes sociales. La gente camina apurada rebasándome y codeando mi mochila, como si no les importara lo que sucede en el planeta, personas que se notan tristes, ansiosas y cansadas de la vida, tal vez nadie sepa que en mi mochila cargo dos libretas, una vacía por si algo nuevo tengo que escribir, y otra casi repleta de escritos que me aferró a conservar, aunque ya no tenga espacio para una palabra más, cada libreta con un significado que pudiera acabar con sus problemas si tuvieran el tiempo de sentarse a charlar.
La inspiración es extraña, aunque por cierta temporada no la siento, llegan lo fríos del otoño y parece que se contenta conmigo, querida inspiración como me hiciste falta, sin ti no sé vivir y solo veo pasar los días como lo hace el calendario, solo veo pasar las horas como lo hace el segundero. Se siente, ya se siente cerca el viento frío de un diciembre que ya no tarda, el ambiente lo está gritando y junto con el mes de julio llega la primera brisa del otoño, aunque aún se divise lejos, está más cerca de lo que creemos, y es en este momento, junto con esa primera brisa cuando empiezo a escribir como un verdadero poeta. Al menos para mí, así lo hago, y es lo que importa.
Estoy cansado de escribir por madrugadas enteras, y no es la primera ocasión que me siento así, es solo que para vivir en la rutina no he nacido, siempre fui distinto a los demás y eso me trajo a este momento, donde vi pasar la tarde sin parpadear, con una mezcla de emociones entre nostalgia y felicidad, una mezcla perfecta como oscuridad y lluvia o sexo y blues, y ahí es donde aumentan mis ganas de escribir algo nuevo, algo para esa época del año donde nos gusta pensar que existe el cambio y no hay rencor, fechas especiales para el mundo en general, esas fechas donde el ser humano recuerda que tiene un corazón, fechas aún lejanas, fechas que aun ignora la gente, fechas que aunque son lejanas ya se logran percibir en el ambiente, ese viento un poco frio después de varios días de lluvia, o quizás solo soy yo quien relaciona este clima de lluvias con el mes de diciembre, o quizás es que conforme voy creciendo le empiezo a tomar sentido a esa nostalgia que se siente después de pasar la mitad del año y no sentir que hice nada nuevo en absoluto. Pero este año si hice algo nuevo, tuve la mejor y más absurda idea; este diciembre vamos a abrazarnos desde un día antes del fin de año, y así cada año abrazarnos un día antes más, y al siguiente, un día antes más, y así por muchos años más, hasta que en un futuro sea costumbre que los seres humanos se abracen diariamente, que se sustituya el ignorar a los desconocidos en la calle, con un abrazo de humanidad entre dos personas desconocidas, tal vez eso nos haría mejor especie, tal vez eso evite nuestra extinción.
Se nos fue medio año y ni nos dimos cuenta.
Me gustaría recibir crítica sobre este escrito, ya que no siento que mi gramática y ortografía sea correcta, al igual que la redacción.