En la niebla mi sangre asciende.

Alejandro_Milla

Niebla

 

La niebla por la que camino es lo más cerca del cielo que he estado.

 

Voy por una vereda estrecha y empedrada; vereda empapada de gotas que a la lluvia le robaron las ramas.

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Camino con la sombra prestada de la falda que arrastran los aguaceros. Camino sintiendo sueño, despierto, pero muriendo.

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Huelo el azufre de las nubes mundanas, que bajan a la tierra a esconder la pena de las almas.

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Niebla ladrona de los claro. De las luces de las lámparas. Niebla etérea, que se mete por las ventanas aún cerradas.

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Niebla embustera, que susurra paisajes lindos al oído de las fatuas. Niebla que engalana el hurto de los astros; que a la luna de los ojos religiosos la aparta.

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Reminiscencia calma del viento húmedo. Aliento tibio y turbio del agua, vapor de la tierra y sus entrañas.

 

Niebla de fragancia franciscana. De paredes amuralladas con la fascinación y el miedo.

  

Niebla que te quiero muerta. Como muertas todas mis ganas. Niebla que me sorprende llorando en la esquina de una plaza.

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Niebla que promete llevarse mi aliento.  

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Niebla que te lloro, que te lloro porque sé que eso no es cierto.