¡Bienvenido/a!

Pareces nuevo por aquí. Si quieres participar, ¡pulsa uno de estos botones!

De América no se sale (2ª Parte)

evilaroevilaro Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita s.XIV


Al volvér los pócos superviviéntes diéron párte de lo ocurrído. Se preparáron ótras expediciónes «secrétas» pára ver qué éra lo que ocurría allí y cómo éra posíble úna péste tan terríble y que contagiáse tan rápidamente y a tánta distáncia.

Duránte áños, después del «Descubrimiénto», y a escondídas: Espáña, Portugál, Fráncia, Inglatérra y ótros, tratáron de conquistár las cóstas éste de América y los asiáticos, Japón, Chína e Índia las del oéste.

Con un gran cósto en vídas, póco a póco se fué aprendiéndo la distáncia de seguridád con los natívos, ésta dependía de la fuérza, dirección y velocidád del viénto, de la proximidád a los aborígenes y al calór, a mayór temperatúra mayór contágio.

Y con grándes esfuérzo y múchas pérdidas humánas acabáron explorándo y descubriéndo que «éso» éra úna ísla, úna gran ísla, un inménso continénte. Y que la cáusa de que no se hubiése descubiérto ántes ésa inménsa tiérra, a pesár de su enormidád y estár en el céntro de vários continéntes y en algúnos púntos relatívamente cérca pára los grándes bárcos que surcában sus máres, éra que tódos los que se acercában a los indígenas, morían, se podría decir que cási tódos los que hubiésen llegádo a América y vísto a sus habitántes, no lo lográron contár.

Pára podér acercárse a éllos, se probáron trájes herméticos de protección que no sirviéron de náda. Hásta el más pequéño agujéro permitía el páso de la infección.

Se diseñáron trájes metálicos, por si éso pudiése ayudár, péro el resultádo al fínal éra el mísmo.

Múchos áños después, algúnos de los indígenas de América, sabiéndo ahóra que había ótras tiérras y géntes más allá de sus territórios, se fuéron acercándo o más bién alejándose de sus cóstas y se topáron con vários bárcos européos o asiáticos.

El resultádo de ésos encuéntros fué horríble, fatál y mortál, y al finál tódos aceptáron que tódo el planéta debía unír fuérzas pára patrullár los límites de América e impedír que los americános saliésen, o por lo ménos hásta lográr úna vacúna o un sistéma que nos inmunizára o protegiése cóntra ése contágio.

Pasáron múchos áños y grácias a los adelántos científicos, lográmos «a distáncia» aprénder sus lénguas y podérnos comunicár con éllos. Son génte como nosótros, ni mejóres, ni peóres, péro técnicamente múcho más atrasádos que nosótros.

Éllos sáben cláramente la situación… están advertídos y lo comprénden. Por el único sítio que no patrullámos tan inténsamente es por donde hay frío, por el nórte y sur. Por algún motívo la plága o contágio no se extiénde cuando hay bájas temperatúras a ménos que tengámos un contácto físico muy cercáno. Cuando se captúra a algúno en ésas condiciónes, cási no presénta pelígro… péro se le devuélve o se le háce retrocedér.

* * *

Con permíso capitán,

—Páse ustéd.

—Tenémos ya lísto el párte a enviár a las autoridádes americánas de las bájas. 38 en totál. Con sus fótos, regístro de sus vóces, cási la seguridád de su procedéncia, y desglosádo tódo por séxo y edádes.

Hémos añadído como ustéd nos indicó nuéstras condoléncias y nuéstro deséo de que mejóren su sistéma de vigiláncia pára que ésto tan horroróso no vuélva a sucedér. Por supuésto les indicámos el sítio del hundimiénto por si éso les pudiése ayudár.

   Señór, si lo revísa y apruéba, lo enviarémos inmediátamente.

—Tódo corrécto, por favór procéda. Y si dan respuésta, que lo dúdo, me lo notifíca.

—Grácias Señór, así lo haré.

* * *


Continuará>>>>><

Accede o Regístrate para comentar.


Para entrar en contacto con nosotros escríbenos a informa (arroba) forodeliteratura.com