Suicidio colectivo entre las patillas racionadas como gotas de lluvia en la mañana, gotas de sudor, gotas como botas de profundo crujir. Pisando la corteza que lo cubre con esa sabana blanca teñida con esos cuerpos clavados en el suelo machacando los gritos lejanos de una mente sollozante, pidiendo, suplicando un aliento o desaliento., que cabe una tumba impensable, arrojando su alma al vació y su cuerpo despojado de vida yace en el olvido de la oscuridad sombría.
Desapareced de entre los vivos, que viven como zombis pasando de la vida y de la muerte…., y de esa gente, esos vivos que están pero que son prescindibles, insolidarios ellos, diezmemos esa población de estúpidos babosos que no cuentan, estorbos humanos desechos, entre llantos mártires sin causa, don nadie, que si desaparecieran nadie lloraría una gota sobre los cristales de los vivos y yo jadeante estúpido y baboso espero el descanso de la muerte.
Comentarios
Ese titulo le pondria a tu cuento: Don nadie.
un abrazo,
un saludo