Phortos
cuando la sobriedad
de la resaca llegue
y puedan verte con otros ojos
quizás vean
entre las plumas
tu corazón.
Phortos
cuál artista te diseñó
vertiginosamente
desdibujado en partes,
exacerbado en otras
patas y estiércol te adornan
gorgojeos y gorgojos también.
Phortos
en la conciencia que forja tu pico
cuántas se han perdido,
echado al caldo
como alfeñique
nadie hay quien te llore.
Phortos
engendro mío
te he creado hoy
para que nada haya
que pretenda ausencia
en nuestra cercanía
que pretenda odio
en nuestro amor.
Comentarios
Me gusto el poema. Las plumas, el corazón, creo que se hizo bien.
Un saludo !