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A todos los que nos gusta escribir, sabemos lo importante que son las figuras retóricas; sin ellas, es imposible embellecer y dar vida a nuestros poemas y prosas.
Las redacciones sintácticas, desde luego que son la base de la escritura, sin la cohesión, la coherencia, la catáfora, la anáfora, la elipsis y la deixis nuestros escritos o prosas, más que escritos coherentes parecerían jitanjáforas.
Los grandes poetas y prosistas, en todas las edades literarias, han recurrido a las figuras retóricas alterando el orden sintáctico de los enunciados, en busca de la plasticidad de sus obras. Si Gustavo Adolfo Bécquer hubiera compuesto “Volverán las oscuras golondrinas…” conforme a la sintaxis gramatical: Sujeto, verbo y predicado, hubiera quedado así:
“Las oscuras golondrinas volverán a colgar sus nidos en tu balcón”
Pero gracias al hipérbaton, lo compuso así:
“Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar”
Como se observa, conforme a la sintaxis no concede poesía al verso, pero con el hipérbaton, si resulta bello.
La alegoría, es la figura retórica que da más versatilidad a los poemas, ya que fluye del pensamiento, y con ella, se han compuesto los más bellos poemas.
Resumiendo: si alguien está interesado en conocer todas las figuras literarias, me ofrezco como coordinador, y podríamos formar una especie de tertulia para conocer en profundidad las mismas para dar mucha más plasticidad a nuestros versos y prosas.
Saludos.
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