Mi Tú y de Nadie
Ayer, volvió tu recuerdo,
ayudo a invocarlo,
esa tarde fría,
las risas ajenas,
que arrastraba el viento.
¿Hace cuánto tiempo?,
ya no te pienso,
lo fascinante que fue,
tu compañía,
cada una de nuestras horas perdidas.
Fuimos tan dispersos,
mártires con deseo,
entre abrazos y sonrisas,
disfrutamos tan pocos momentos,
tus ocasos y yo con caricias.
Me gustaba tanto de ti,
que me confieso,
cambiaste entre ideas,
límites y colores,
que disfruto de practicas nuevas.
Mi tú y de nadie,
capsulas de anhelos,
solo fue una idea,
cuando vuelves sin tormento,
a ubicarte en este día,
frio y sin lamentos.