¡Bienvenido/a!

Pareces nuevo por aquí. Si quieres participar, ¡pulsa uno de estos botones!

Por encima de mi cadaver (Parte 3)

licomanuellicomanuel Pedro Abad s.XII
editado mayo 2015 en Humorística
[FONT="Arial","sans-serif"]Un sonido de saliva en la boca comienza a resonar en la habitación. Es aún más obsceno que el de Aníbal Lecter al acordarse del hígado y del chianti. Los miembros del séquito están derramando literalmente su baba sobre el guapo que ahora ya denitivamente no es guapo (en adelante, lo llamaremos el acribillado). Entonces, los del séquito dejan sus exquisitos y estrictos modales a un lado y comienzan a engordar los músculos de la boca, mientras desencajan las mandíbulas en una mueca que haría que un mismísimo alien se acojonara y muestran unos dientes afilados y largos como si de un perro del infierno se tratara. Comienza la carnicería. Todos se lanzan en caída libre a por su trozo como una jauría de lobos. Incluso uno de ellos salta y hace el gesto de estar zambulléndose. El acribillado es pasto de los comensales que al terminar, mientras se relamen y se quitan los restos de piel y sangre de la boca, miran al gordo. Lo ven como una gigantesca chuleta de ternera, con salsa barbacoa y todo.[/FONT]

[FONT="Arial","sans-serif"] Los presentes se ponen un poquito más tensos de lo normal. Los que acaban de comer (en adelante, los comensales) con el calvo a la cabeza, se levantan de sus sillas y se dirigen hacia el gordo que da un par de pasos hacia atrás quedando en la penumbra, hasta que se detiene. De repente, una risa, un murmullo comienza a llenar el silencio de la habitación y los comensales se detienen a oír las carcajadas. El gordo ocupa su espacio de luz donde sus ojos son como dos vetas en un mármol recién extraído, de una forma antinatural, sin párpados, riéndose. Los comensales, al verle, empiezan a reírse también y pronto, las carcajadas son de campeonato.[/FONT]


[FONT="Arial","sans-serif"] Gordo: "Me habéis dejado algo para cenar, cabrones?", pregunta mientras señala al acribillado con la pistola.[/FONT]


[FONT="Arial","sans-serif"] En ese momento, el acribillado se incorpora y con una caja de dientes en cuarto creciente que no sabe cómo mantener dentro de la boca, se cuadra. La cabeza tambaleándose a ambos lados.[/FONT]


[FONT="Arial","sans-serif"] Acribillado/cena: ".......Urdaci?".[/FONT]


[FONT="Arial","sans-serif"] El gordo(/abominación) y los comensales se vuelven hacia el acribillado. Lo miran con desdén. El gordo agarra la pistola y le pega otro tiro entre ceja y ceja.[/FONT]


[FONT="Arial","sans-serif"] Gordo: "Te calles ya, coñoooooo!!!!!".[/FONT]


[FONT="Arial","sans-serif"] FIN[/FONT]
[FONT="Arial","sans-serif"] [/FONT]
[FONT="Arial","sans-serif"] Este relato está escrito en memoria y homenaje a las tardes de lectura de nuestras propias historias en el Colegio Virgen de la Fuensanta.[/FONT]
Accede o Regístrate para comentar.


Para entrar en contacto con nosotros escríbenos a informa (arroba) forodeliteratura.com