XXX
-¡Al contrario!- gritó María, en medio del desánimo general.- Que venga el taxista es una buena noticia.
-¿A qué te refieres?
La rodeamo…
XXIX
-Permitid que me presente- prosiguió el gordo.- Me llamo Luis Carlos, pero aquí todos me llaman Escalope. ¡Escalope! Jajajaja ¿Lo entendéis? Luis Carlos lo confunden con Escalope. O bien será por mi gordura, todo es posible. Pero como yo digo…
XXVIII
Llegamos al atardecer al aeropuerto. Yo había propuesto descansar, pero José tenía ganas de subirse a un avión y abandonar el país, así que forzamos las piernas.
-Halt!- dijo un policía alemán cuando nos acercábamos a la terminal 1. Se tra…
XXVII
-Te digo que ahí no bajo.
-Pero si no está en Dresde.
-Que yo no quiero morir.
-A ver, niñito- me dijo Pina- se le llama aeropuerto de Dresde, pero es el distrito de Klotzsche.
-¿Y ahí no moriré?
-No. En Klotzsche no.
-En ese caso...
Seguimo…
XXVI
Corrí detrás de Pina, preocupado.
-¿Qué has querido decir?- preguntaba.
-¿Acaso no me has entendido?
-Si. Pero ¿cómo lo sabes?
-Soy un poco bruja.
-Entiendo. Pero ¿y si...? ¿Y si nunca entro en Dresde?
-Si no entras ¿qué?
-Si no entro. ¿Qué …
Fueron los primeros, Suina, aún no sabía que te iba a gustar la novela :D
Pero si vuelvo por las canarias te aviso!!! :)
Amparo, ufff, lo tuyo es más difícil. Si quieres quedamos mejor en medio. Ah, no, calla, que en medio está el océano ;):rolley…
XXV
-Ese aeropuerto- dijo Pina- es el de Dresde.
-¿Es bonito Dresde?- pregunté, distraído.
-Dresde- Noté cómo se le erizaban los cabellos- ¡Dresde es el infierno!
Abrió los brazos como si se tratase de un águila. Dio dos saltos y cayó sobre las p…
Pues, la verdad, es que los primeros diez capítulos (primero incluído, claro) los escribí del tirón en un viaje de Tenerife a Madrid. Me aburría mucho en el avión :D
el resto sí lo he meditado un poco más.
Hace muchos años me gustaba mucho Julio Camba, tengo que admitirlo. Era muy divertido. :)
Por cierto, se entiende el chiste del hijo? Tengo la impresión de que no, podría reescribirlo!
XXIV
-¡Un avión, un avión!- gritaba José a la mañana siguiente.- Un avión ¡Estamos salvados!
-¿De qué están salvados?- me preguntó Pina.
-No lo sé. Son así. Creo que entre ellos se entienden.
Branca no compartía su ilusión. José se lanzó, dispues…
XXIII
Paramos al atardecer en un valle, cerca de un riachuelo. Los portugueses estaban agotados y muertos de hambre. Yo también estaba cansado, pero me abstuve de decirlo. Pina me dijo que quería hablar conmigo, en privado.
-¿Qué ocurre?
-Habrá qu…
XXII
Pina nos guió por un camino de tierra que, según afirmaba, nos había de llevar hasta las puertas de Baviera. Charlaba conmigo y, de vez en cuando, me sonreía y me tiraba un beso que no me molestaba en sostener.
-Habéis elegido bien- decía- s…
XXI
Nos sentamos en círculo. Les pedí su opinión sobre Pina.
-¿A ti te gusta?- preguntó Branca.
-No se trata de eso, se trata de decidir si nos acompaña.
-Bueno- dijo José- seríamos dos parejas de amantes.
-¡Y dale! ¡Que me dobla la edad!
-A ella…
XX
-La rata es sabrosa. Tanto como el pollo. Basta con tirarle de los tendones, y arrancarlos del cuerpo.
-¿De verdad están muertas?
-¿Tú ves que se estén moviendo?
-No.
-Entonces a hincarles el diente. Sería mejor asarlas, pero no se puede encende…
XIX
Salimos a la calle. Nos habíamos propuesto encontrar algún cobertizo donde dormir, ya que el precio de las habitaciones era excesivo. Los portugueses se abrazaban con una ternura antes desconocida.
-Observa las estrellas, María, es decir Branc…
Que cosas más bonitas me escribes, Suina!
A mi también me gustaría verlo en libro.
Pues de momento va para largo pero me pensaré lo que me dices, y tal vez le de un final pronto.
Saludos!