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Anoche Soñé que Alguien me Amaba (por Carlos Serrano)

CarlosSerranoCarlosSerrano Fernando de Rojas s.XV
editado febrero 2015 en Narrativa
ANOCHE SOÑÉ QUE ALGUIEN ME AMABA.

"Los vínculos del matrimonio son tan pesados que se necesitan dos personas para llevarlos...y, en ocasiones, tres." Alejandro Dumas.



Estamos, Elena y yo, hablando sobre los poderes afrodisíacos del chocolate con almendras. O mejor dicho: el por qué una tableta de chocolate con almendras es el mejor sustituto del sexo. Elena y yo nos hemos sentado junto a la máquina del café en aquel solitario pasillo del hospital. Reina el silencio en mitad de la madrugada y aunque solo nos conocemos desde hace veinte minutos no podemos parar de hablar. Ella luce una alianza de oro en el dedo y eso me hace recordar esa canción que dice: "Puedo ver el destino que vendiste transformado en una brillante banda de oro." Yo no estoy casado (¿quién me iba a soportar?) así que estoy fascinado con Elena, con su manera tan deliciosa de coquetear.

Hemos sacado dos capuchinos con sabor avellana de la máquina y mientras los removemos no paramos de contar anécdotas. Ella se queja de las tetas aplastadas que tiene (herencia materna), yo le confieso ,que aunque suene estúpido, uno siempre quiere tenerla más grande. Nos reímos de nuestras propias tonterías. Allí, en mitad de la noche y del silencio, dos extraños nos sentimos como turistas exóticos y nos refresca el sentir la mirada curiosa del otro en nosotros. Somos divertidos, amables, carismáticos en ese momento, a pesar de lo aburridos y grises que somos en la vida real. Ella me mira, yo la miro. Por un rato nos sentimos vivos y excitados, renovados, frescos, calientes, emocionados. Con ese cosquilleo en el estómago al estar con alguien que conoces tan poco que todo es posible, incluso que sea la persona que cambie tu vida.

Hasta que me encontré con Elena la vida me había parecido como una oscuridad que me obligaba a buscar a tientas la llave de una puerta que estaba abierta de par en par. Espero que Elena no piense que soy un pretencioso, un pedante. Creo que eso es lo que hago sentir a las mujeres cuando trato de impresionarlas. Pero en este momento, creo, que la química ha tenido más importancia que las palabras. Que sin saber por qué nos gustamos. Estamos cómodos en nuestro propio mundo recién creado...

Como siempre decido arriesgarme (¡la vida es muy corta!). Me acerco a besarla. Tomo sus labios tiernamente. Y ella luego se queda mirándome. Sonríe y luego menea la cabeza. ¿He metido la pata?¿Me he pasado? Ella me acaricia la nuca de forma maternal. Dice que mi beso ha sido muy tierno, demasiado tierno. No hubiera estado mal, dado el caso, desahogarnos follando -dice ella. Pero no cree que sea buena idea darse besos tan tiernos. Así que confieso mis sentimientos: deseo más enamorarme que follar. Y allí se rompe nuestro mundo, nuestro momento. Los capuchinos casi vacíos se enfrían. La madrugada parece ahora de hielo. El amor puede arreglar tu vida pero te romperá el corazón (¿no decía eso la canción?).

Elena y yo nos despedimos. Cada uno se larga a una habitación. Anoche soñé que alguien me amaba...pero solo fue otra falsa alarma...

Comentarios

  • amparo bonillaamparo bonilla Bibliotecari@
    editado febrero 2015
    Ya sabes para la proxima, besos mas profundos:D
  • CarlosSerranoCarlosSerrano Fernando de Rojas s.XV
    editado febrero 2015
    amparo bonilla escribió : »
    Ya sabes para la proxima, besos mas profundos:D

    Ay, que mala eres.:D
  • SkarletSkarlet Gonzalo de Berceo s.XIII
    editado febrero 2015
    me ha gustado mucho, pero me ha chocado un poco "el follar" ante un texto con tanta sensibilidad,
    pero leyéndolo otra vez, queda genial ya que refleja totalmente la personalidad de él ,un romántico, y ella una libertina, de hoy en día.

    El final precioso, !!!qué tanto sexo, ...amor es lo que queremos!!!

    pdta.: lo de "libertina" lo digo totalmente entre comillado, nada de sentido peyorativo.
  • CarlosSerranoCarlosSerrano Fernando de Rojas s.XV
    editado febrero 2015
    Skarlet escribió : »
    me ha gustado mucho, pero me ha chocado un poco "el follar" ante un texto con tanta sensibilidad,
    pero leyéndolo otra vez, queda genial ya que refleja totalmente la personalidad de él ,un romántico, y ella una libertina, de hoy en día.

    El final precioso, !!!qué tanto sexo, ...amor es lo que queremos!!!

    pdta.: lo de "libertina" lo digo totalmente entre comillado, nada de sentido peyorativo.

    Gracias, Skarlet. Yo creo que no hay nada peor que el que se encuentren dos personas con química entre ambas pero con distintos objetivos:D Ni que decir tiene que yo me he encontrado en esa situación y es lamentable encontrar a una chica maravillosa que sin embargo le pide a la vida cosas distintas que yo. Por supuesto no se trata de que nadie sea mejor que nadie sino de no coincidir. Y creo que ahí está el secreto de las relaciones, todo se resume en coincidencias...en las necesarias, claro, porque el gusto también está en la diferencia ¿no?:rolleyes::o
  • SkarletSkarlet Gonzalo de Berceo s.XIII
    editado febrero 2015
    Totalmente de acuerdo contigo, pienso que lo que más nos atrae de los demás es lo que reconocemos que no tenemos, ...y valoramos, claro,
    y en plan de pareja igual, se busca siempre alguien diferente a uno mismo, en mi caso lo tengo claro,
    yo hay veces que no me soporto a mi misma, soportar a otro igual que yo sería pa morirme.
  • CarlosSerranoCarlosSerrano Fernando de Rojas s.XV
    editado febrero 2015
    Skarlet escribió : »
    Totalmente de acuerdo contigo, pienso que lo que más nos atrae de los demás es lo que reconocemos que no tenemos, ...y valoramos, claro,
    y en plan de pareja igual, se busca siempre alguien diferente a uno mismo, en mi caso lo tengo claro,
    yo hay veces que no me soporto a mi misma, soportar a otro igual que yo sería pa morirme.

    El otro día leía Miedo a Volar de la escritora Erica Jong, un texto muy autobiográfico, y definía el matrimonio y las parejas de una forma muy bonita para mí: como dos personas que se necesitan y se cuidan y que se defienden mutuamente del mundo exterior.

    Yo he estado siempre con personas muy diferentes a mí (aunque claro con grandes cosas en común) lo cual las hacía interesantes, porque creo que no hay nada más interesante que intentar comprender a quien no es como tú, sobre todo cuando al otro encima lo admiras. Y yo he admirado a esas personas precisamente porque tenían virtudes que yo ni podía soñar tener. De todas formas creo que enamorarse es eso: admirar al otro, sea como sea.:rolleyes:
  • XocasXocas Pedro Abad s.XII
    editado febrero 2015
    Me da mucha envidia la gente que, como tú, es capaz de imaginar situaciones tan maravillosas. Si encima lo cuentas de esta deslumbrante manera, ya la envidia me corroe sin más, sin remedio. Mis felicitaciones.
    Y sí. Me temo que las cosas importantes de esta vida suelen depender de coincidir en el tiempo y el espacio, lo cual es tanto como decir que eso que llamamos felicidad es un puro accidente que depende de un puro capricho del azar. Cuántas felicidades habremos "dejado" pasar de largo porque no podíamos pararnos en ese segundo o en ese lugar...
    Por si acaso, (mira qué coincidencia), hace una temporada que me he recetado una tableta de chocolate negro con almendras que me debe durar una semana. No llega a la semana ni pa dios... :D
  • CarlosSerranoCarlosSerrano Fernando de Rojas s.XV
    editado febrero 2015
    Xocas escribió : »
    Me da mucha envidia la gente que, como tú, es capaz de imaginar situaciones tan maravillosas. Si encima lo cuentas de esta deslumbrante manera, ya la envidia me corroe sin más, sin remedio. Mis felicitaciones.
    Y sí. Me temo que las cosas importantes de esta vida suelen depender de coincidir en el tiempo y el espacio, lo cual es tanto como decir que eso que llamamos felicidad es un puro accidente que depende de un puro capricho del azar. Cuántas felicidades habremos "dejado" pasar de largo porque no podíamos pararnos en ese segundo o en ese lugar...
    Por si acaso, (mira qué coincidencia), hace una temporada que me he recetado una tableta de chocolate negro con almendras que me debe durar una semana. No llega a la semana ni pa dios... :D

    La verdad es que si, cada vez pienso yo también que la felicidad depende más de la casualidad que de otra cosa. Y el amor. Yo me he enamorado y he disfrutado de relaciones largas y estables por pura casualidad, por accidente. Porque cuando busco intencionadamente el amor (o sea, una mujer) fracaso miserablemente.:D Siempre tengo que esperar a que se produzca un error en el destino y aparezca una mujer maravillosa que tonta de ella se enamore de mí.:D

    Mi abuelo le gustaba derretir un cuadradito de chocolate negro en la leche caliente. Me has recordado eso porque él también se compraba chocolate negro y se echaba cada día un par de cuadraditos en la leche...yo en cambio procuro estar alejado de ese vicio. Más que nada porque aunque me encanta enseguida el chocolate tan denso me provoca pesadez de estómago...:rolleyes:

    Y gracias por lo que dices del relato. Cuando pasa un tiempo releo mis textos y los encuentro llenos de imperfecciones y me avergúenzo de ello.:D Pero descubrí que eso era normal, todos los escritores se pasan la vida repasando y corriegiendo sus textos...un trabajo que no se acaba nunca porque nunca se está satisfecho...:rolleyes:
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