Entre doradas columnas
del atrio de querubines
rosas, risas y reclamos
se oyen eternamente.
Los juegos, son alhajitas,
que pide el pueril bullicio,
es el lugar de la dicha
de entidades pequeñitas.
Suena de pronto un susurro
que abarca a todo el entorno
el Amor habla y se escucha:
–¿Podéis en algo ayudarme?
Caritas con seriedad
¿Ayudar? se miran fijo
¿Cómo ayudar al Amor?
¡Si nada somos, ¿verdad?!
–¿Quién quiere dejar el atrio?
pregunta la voz muy quedo.
Asombro y preocupación
–¿Dejar el atrio, nos pide?
–¿Dejar el atrio, Señor?!
–¡Tengo miedo! Lisbel dice.
–¿Por qué?, –pregunta el murmullo.
–¡Por soledad, sin Amor!
No se ve pero se siente
la sonrisa del Amor
–No mi pequeña, –responde:
conmigo siempre estarás,
recuerda Quien te lo pide
y siempre ante Mí serás.
Es cálida la caricia
del Amor, que la decide:
-Iré, mi Señor, entonces,
-dice con resolución
Y vuela, y vuela rauda
en busca de su destino...
–¡Ya llega, tengamos calma!
–¡Es una niña! –se dicen
Y entre vagido y vagido
Lisbel obtiene su Alma.
Comentarios
Me sorprendiste con el final, hasta entonces no terminaba de entender.
Te felicito, valiente elección y muy bonita forma de expresar algo tan misterioso.
:)Gracias, Serrana:)
Cuando pensamos que se nos ha contado que los ángeles en el cielo carecen de alma, se me estruja el corazón. ¿Será verdad? ¿Habrá ángeles? ¿Habrá cielo? pero sin alma, ¿sólo espíritu?
Si es así, vale la pena aceptar el riesgo del mundo ¿verdad? Por algo tan valioso como un Alma.
Es difícil expresar las emociones que esto provoca pero escondido detrás de un adorable querubín, es más fácil y hasta infantil.
En fin, la soledad del ferry me suele afectar así.
Un abrazo.
PD: no es que la poesía no me guste pero... no se... nunca me apetece leerla. Es una tontería porque hay cosas realmente buenas, por eso me obligo a pasarme por aquí de vez en cuando.
Te entiendo, texas, suele pasarme con algún tipo de literatura, incluida la poesía, debo esforzarme por leer y de pronto me sorprendo.
A veces, sin querer, con solo obligarnos a mirar algo que no nos llama la atención comienza el camino de aprender a disfrutar de cosas que no pensábamos podían darnos deleite. No hablo de mis flacos intentos por tentar a la Musa a decir cosas bellas, me refiero más a la poesía en general que puede llegar a darnos muchas satisfacciones.
Gracias por el esfuerzo de leerme, por comentar y por tu sinceridad. Vale mucho.
¡Es verdad! no lo había visto desde ese ángulo. Clásica en el sentido ordinario, simple y de resolución poco original, además efectiva si le concedemos el impacto emocional también ordinario simple y vulgar. Gracias Dixie por hacer notar este aspecto.
Que sí, que me ha gustado mucho la poesía. Un saludo a Lisbel y ¡enhorabuena por el alma!.:)
Gracias por la información, abre más interrogantes acerca de los ángeles. No me cabe duda que tienen propiedades especiales y que su posibilidad a acceder a la contemplación de la deidad es única pero me sigo preguntando si tienen alma, según parece no es así, por eso la humanidad estaría destinada a un bien mayor. Interesante disquisición, aunque no podamos salir del reino de la fe, lo que nos constriñe un poco.
Gracias nuevamente, Miguel
Me sorprende el sentido que para ti tiene Clásico, muy diferente a mi idea. Me refiero a la poesía clásica que es muy estética, y que de ordinaria, simple, poco original y vulgar no tiene nada. Interesante la significación que le has dado a mis palabras. El sentido más peyorativo que yo le puedo otorgar al "clasicismo" es su sentido anacrónico, su lenguaje barroco y alejado de la realidad actual.
Releyendo mi respuesta creo que se puede inferir lo que dices, esto es resultado de un texto poco pensado y con la idea de que el interlocutor puede ver el pensamiento de origen. Es mi falta lo reconozco. En realidad mi intención era mencionar las falencias de mi intento poético, no me refería a lo Clásico como espejo en el que pudiera reflejar mis esfuerzos primerizos ya que no poseo conocimientos suficientes como para ello. Pero sí pude vislumbrar el ángulo de visión con que me lo presentabas y me agradó ese hecho porque me abrió nuevos horizontes.