Hace tiempo que no escribo, solo leo algunas cosas.
Quiero escribir pero me siento puma…. Eso no es mío para nada. Quiero escribir los versos más tristes esta noche… eso tampoco es mío, ni a palos es mío. Además no es de noche es de día estoy en la oficina, el trabajo está asignado todos miran sus pantallas nadie me mira y pienso en escribir algo.
Quisiera un cigarro pero ya no fumo, solo lo quiero y lo deseo. Si lo amara sería diferente.
Ayer mi hija me dijo que me amaba, le estaba leyendo un cuento, me tomó del brazo y me lo dijo. Le besé la frente, se acomodó y se durmió. Si, si ya sé que los intelectuales no se reproducen. No soy intelectual, tampoco me gusta estar citando a cada paso que doy, los ochocientos cincuenta mil trescientos cincuenta y cuatro libros que he leído. Soy un vulgar ladrón.
A veces tengo ganas de regresar en el tiempo, estudiar literatura, antropología, historia y filosofía. Pero estudiar, estudiar por las buenas. Como estudié ingeniería. Pero preferí la ingeniería. Es algo más concreto, no duele. Es fría inhumana, dura con los necios y más dura con los teóricos.
Ya está, ven. Estoy escribiendo.
El dieciséis de julio fue día de la Virgen Del Carmen, ese día es el cumpleaños de una chica que fue mi enamorada (iba decir:”que fue mía”) pero esto no es novela es simplemente soltar el teclado y que este discurra en la pantalla, que parezca que estoy trabajando pero estoy en plan H.
Ayer fue el onomástico de otra chica que también fue mía, esta fue una loca como uno de los amores de Martín Adán en “La casa de cartón”. Aquí no se si escribir de “La casa de cartón”, de la chica o de Martín Adán. Ese tipo estaba loco, era un genio y era un borracho. Algunos por aquí solo llegamos a borrachos. El se convenció que estaba loco y voluntariamente se internó en un manicomio.
Una chica pasa con un pan a cuestas… eso es jugar con las palabras de Vallejo. Sus zapatos suenan, en realidad suenan sus tacos, a donde irá no lo sé. Recuerdo una mujer que esperaba por las tardes y la reconocía por el sonido de sus tacos. Era como un perro que ya sabía que llegaba su ama y movía la cola sin haberla visto todavía.
No sé a dónde voy con esto, ni sé qué decir.
No tengo blog, no he publicado nada en amazon. No hay poesía, no hay armonía, no hay magia.
Estoy aterrizando lentamente.
Es todo.
Comentarios
Y me perdonará, pero con lo que NO estoy de acuerdo es con esto:
La ingeniería es el mejor arte que existe. De ella surgen los mejores poemas, las mejores novelas, los mejores textos de un creador. No es fría, es hermosa, es todo lo que un humano aspira a ser; es la perfección. No es dura, simplemente no es una ramera que se deja manosear por cualquiera. La ingeniería, Juancho, ese ese 'nirvana' que todos buscan.
Siga escribiendo, caramba. ¡Gracias por compartir la buena lectura!
¡Muy bueno! Hombre, si así escribís cuando no sabés escribir... ¡empezá a escribir ya!
Gracias digo también por compartir.
Saludos
-- Diego.
Gracias por sus comentarios bastante motivadores.
Es de gente decente agradecer.
Saludos
Pd.: También la gente decente maldice, pero en este caso no aplica.
Saludos, y ánimo. Que el mundo y la vida son una m. ya lo sabemos.
Atreverse o no atreverse, mientras estás en eso, siempre tendrás gente con la que compartir por estos lados.
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Dr. Gato el texto es eso, es una circunstancia nada especial. Soy un gato común y silvestre. Usted es un gato doctorado.
Estimado cielito soy un simple usuario de este foro y “lo o te” conozco desde que usted era un tipo reconocido por sus reflexiones y lo odiaba por eso. Lo odiaba en silencio como se odia lo que no se puede ser. Esa es la manera más sana de envidiar.
Con el tiempo me di cuenta que este foro es un libro interminable un libro que nunca terminará de editarse porque siempre alguien tendrá algo que decir. Al hacer eso aprendí de “ti o de usted” como quiera llamarse. Aprendí de los que se han ido y los que dicen que se van y no se han ido.
Aunque algunos lo consideren un libro de reclamaciones. Eso es un error.
Un gran abrazo.
Pd.: Espero me entiendan porque hoy estoy más enredado que cuando estoy sobrio.
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Hoy día me hablaste y me sentí diferente.
Varias semanas hace, varios días que te veo furtivamente como quien no ve pero te veo. Cruzamos miradas, en el ascensor, el pasadizo. Sonreímos amistosamente, jugamos con los ojos con algo escondido. Algo agradable y mágico.
La magia de tu cuerpo me atrae, me gustas, me hierve la sangre cuando te tengo cerca. Me gustas simplemente, no me casaré contigo ya estoy casado. Solamente me gusta hacerte saber que me gustas. Lo que pienses no me interesa.
Hoy me hablaste y sentí que tu voz era una canción lindísima. Al responderte sentí que mis palabras se atropellaban. Mezcle palabras con risas estoy casi seguro que ya sabes que me gustas. Lo demás no me importa.
Es todo.
Escribe más, Juancho.Eres un ejemplo de que la ingeniería tiene alma.
Te saludo con palabras de Celaya: eres "ingeniero del verso".
Un abrazo, estimado amigo.