Bitacora: Inspiración: Una enfermedad. Estaba viendo: The Stand. Musica: (Dont Fear) The Reaper. Tiempo: 30 de Octubre del 2011, 10:00hrs a 12:00hs
Epidemia
Introducción Una fuerte lluvia estaba azotando al pueblo, los truenos no se hacían esperar y el sereno ya había bajado casi hasta el suelo, no era realmente un buen día y muchos menos para dar a luz, la familia Greed se habían quedado atrapados en su casa mientras esto pasaba, habían prendido la radio y en ella se escuchaba todo aquello que ellos tanto temían, “y hay un gran choque en la calle Rio azul, desde aquí por lo que vemos habrá un gran congestionamiento por los siguientes horas” dijo el reportero antes de pasar el control a uno de sus compañeros y empezar a hablar de recetas deliciosas para días de lluvia, una persona de la familia fue a apagar el radio y en ese momento se empezaron a escuchar los gritos desgarradores de una chica en medio de la habitación.
Sigue Beatriz, casi lo logras – Dijo un hombre quien tomaba la mano de la mujer que estaba particularmente perturbado por la situación.
Un ligero trueno retumbo en la habitación haciendo vibrar las ventanas cortadas y pintadas estéticamente, mientras la lluvia caía sin parar, la lugar se encontraba lleno de familiares y gente conocida de la mujer tirada en el suelo, habían planeado llevarla a un hospital, pero aparentemente el clima tenia otros planes para ella, entre esa gente se encontraba un doctor de profesión, un conocido de la familia, lo cual fue el único respiro de suerte que parecían tener en esa situación tan desesperante.
Esto…- Dijo junto a la mujer embarazada un hombre joven con gafas circulares y bata blanca.
¿Qué Pasa? – Pregunto el hombre que había pronunciado el nombre de la mujer - ¿qué es lo que pasa doctor?
Imposible – Dijo el hombre con bata blanca mostrando en su rostro una tétrica expresión, casi incomprensible.
¿Qué le pasa a mi hija? – Dijo de repente una mujer mayor impasible tratando de quitar al medico de en medio.
No mire – Dijo el medico mientras trataba de detener a la madre que se abalanzaba sobre él.
En ese momento un niño de no más de doce años había aprovechado el alboroto y atravesó cuando el doctor se descuido, cuando el doctor se dio cuanta ya era muy tarde, el niño ya había visto lo que sucedía, y repentinamente los ojos del niño se desorbitaron, su boca se abrió de par en par, su respiración se había vuelto agitada y su pecho se veía claramente como se expandía y se contraía, el doctor no pudo hacer nada, se levanto lentamente, se quito los anteojos y se aparto de en medio, sabia que ya no podía evitar que los demás en la habitación vieran lo que estaba pasando.
¡Ah! – Grito la pequeña mujer que era la madre de la chica recostada sobre toallas que a su vez estaban sobre una alfombra marrón en la habitación.
Un bebe, una niña, había empezado a llorar, desde un charco de sangre oscura de color negro tinta.